Un grupo de expertos de la Universidad de Colima construyó un dron capaz de alcanzar una altura de cuatro mil metros y volar hasta 60 minutos, el cual se utilizará para monitorear el Volcán de Fuego.
El vehículo aéreo no tripulado se puede controlar a una distancia mayor a seis kilómetros, lo que no es posible con los drones comerciales, destacó el investigador Mauricio Bretón González, al detallar las ventajas de este dispositivo.
El aparato permite ver la cima, los flujos de lava, los lahares, su alcance y las zonas de afectación en torno al volcán, lo que disminuye el costo y el tiempo de preparación en comparación con un vuelo con una aeronave de otro tipo.
"El dron es una posibilidad para poder volar y obtener excelentes registros visuales sin riesgo alguno". Bretón González
La vigilancia volcánica con drones permite ver las transformaciones del volcán en todo momento y son un instrumento de prevención que da seguimiento al crecimiento de domos, flujos de lava y de lahares, comentó el investigador.