Cae inusual tormenta en el desierto chileno

AFP Chile 27-03-2015 08:27

Se reportan siete muertos tras aludes e inundaciones.

El inusual temporal de lluvia que continuaba el jueves azotando el árido norte de Chile dejó al menos siete muertos tras aludes e inundaciones provocados por crecidas de ríos que por años se mantuvieron secos.

A las cuatro víctimas de las que informaron las autoridades por la mañana, se sumaron tres nuevos cadáveres -aún sin identificar- que fueron hallados en las últimas horas en la región de Atacama (800 km al norte de Santiago), la más afectada por las lluvias.

"En la mañana informamos que teníamos cuatro personas fallecidas y 22 desaparecidos. A esta hora se han encontrado tres cadáveres adicionales", dijo el subsecretario del Interior, Madmuh Aleuy, al entregar un último reporte oficial.

El número de albergados, en tanto, alcanzaba a las mil 500 personas en Copiapó, capital de la región de Atacama, mientras que en la vecina ciudad de Antofagasta se registraban 619 albergados.

Después de varias horas de fuertes lluvias, las precipitaciones cedieron en las últimas horas, dejando al descubierto un panorama desolador en poblados como Chañaral, El Salado, Diego de Almagro, Tierra Amarilla y Copiapó, en la región de Atacama, cuyas principales calles se convirtieron en ríos que arrastraron todo a su paso.

Varias personas debieron subirse a cerros, árboles o a los techos de sus casas para evitar ser arrastradas por el aguas, en una situación descrita como similar a la del paso de un tsunami por pobladores.

Con el transcurso de las horas varias rutas de acceso lograron ser habilitadas, aunque algunos poblados interiores todavía se encontraban aislados.

Unos 15 helicópteros trabajaban en la evacuación aérea de aquellos poblados a los que no se podía acceder vía terrestre por el corte de rutas.

Las comunicaciones telefónicas en la zona se mantenían intermitentes tras un corte en el sistema de fibra óptica, provocando que muchas personas no lograran comunicarse con sus familias e intentaran ubicarlas a través de los medios de comunicación.

En Atacama y en la ciudad de Antofagasta rigió el toque de queda durante toda la noche, luego de que las Fuerzas Armadas tomaran el control de ambos lugares que están bajo estado de excepción constitucional por catástrofe.

Unos dos mil 400 policías y militares resguardan ahora la zona.

Las clases fueron suspendidas para facilitar la instalación de albergues en colegios, mientras que los aeropuertos operaban con retrasos.

Los pronósticos para las próximas horas son más alentadores. "La condición más importante ya pasó", dijo Julio Sarabia, meteorólogo de la Dirección Meteorológica de Chile.