La revelación de un reporte devastador sobre un programa auspiciado por el Estado para ocultar el dopaje generalizado en Rusia derivó de inmediato en exigencias para que el país sea marginado de todas las competencias en los Juegos Olímpicos que comienzan en un par de semanas.
El asunto coloca al Comité Olímpico Internacional en una encrucijada, ante la posibilidad de sancionar a una nación que gastó más de 50 mil millones de dólares para organizar los Juegos Olímpicos de Invierno en Sochi hace apenas dos años.
¿Cómo se montó el programa de dopaje en Sochi 2014?
De acuerdo a la investigación, los rusos estaban convencidos de llevarse el triunfo en los juegos invernales de Sochi 2014, y para ello planearon un sofisticado sistema para encubrir el uso de drogas de sus atletas.
Lo hicieron en su laboratorio de análisis, basándose en un manual de espías creado en la Guerra fría, manual que se orquestó con la ayuda del Ministro de Deportes ruso, Vitali Mutkó, quien dirigió, controló y supervisó la manipulación de resultados analíticos de sus atletas.
El programa operado desde el laboratorio antidopaje en Moscú, abarcó 28 deportes, incluidos algunos invernales, desde el atletismo hasta el snowboarding, pasando por el tenis de mesa.
El caso abre la posibilidad de que una superpotencia deportiva se ausente de los Juegos, algo que no ocurre desde las medidas de boicot registradas en la década de 1980.
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