En conferencia de prensa, el técnico del Barcelona, Luis Enrique, habló sobre el vital duelo que enfrentarán los blaugranas, equipo que suma uno de los 12 últimos puntos posibles en la Liga, este miércoles en su visita a Riazor donde enfrentarán al Deportivo de la Coruña, en duelo de la Fecha 34 de la Liga de España.
"Dependemos de nosotros, pero es evidente que estamos en dificultades máximas", expresó. "No es un recuerdo demasiado placentero. Las dos últimas visitas del Deportivo fueron dos empates. Es un equipo con diferentes variantes. Dependerá de su entrenador, de Víctor. Veremos si repliegan o si dejan a gente descolgada".
El técnico asturiano se ha mostrado muy consciente de que su equipo está en un bache, aunque ha asegurado que "esto lo vamos a solventar como equipo. Estamos en una dinámica negativa y todos hemos salido de situaciones así algún día".
El momento álgido de la conferencia se dio cuando fue cuestionado sobre sí fue una equivocación la respuesta que dio a un periodista tras la derrotan ante el Valencia, en la cual le pidió al periodista que le recordara su apellido (Malo), en un claro mensaje a que su pregunta le parecía mala.
"No tengo nada de qué disculparme. No he faltado el respeto a nadie. Muchos medios faltan al respeto a muchos de nosotros y a mí cada día. Si no les gusta mi estilo, me importa un bledo. Un bledo para decirlo de manera educada".
Por último, el timonel se dijo "ansioso" de que su equipo logre revertir la situación, tras verse alcanzado en la cima de la liga por el Atlético de Madrid y tener solo un punto de ventaja sobre el Real Madrid, para montar un "fiestón".
"Me va el ritmo y la adversidad, lo tengo en los genes gijoneses; soy así de gilipollas. A mí me va el baile, tengo unas ganas enormes porque no me puedo imaginar el fiestón que nos vamos a pegar si ganamos la Liga".