El cineasta estadounidense Quentin Tarantino está que no cabe de la emoción, pues este martes inmortalizó las huellas de sus manos y pies frente a la entrada de un histórico teatro chino de Hollywood.
La ceremonia coincidió con la promoción de su última película, un western titulado "The Hateful Eight", estrenado hace unos días y nominado en tres categorías a los Globos de Oro, que se entregarán el domingo en Los Ángeles.
"Quise poner las huellas de mis manos y mis pies en el teatro chino desde mucho antes de tener una carrera (en el cine); esto es algo que he deseado toda mi vida". Quentin Tarantino.
El director de cine estuvo acompañado por el actor austríaco Christoph Waltz, quien recibió dos estatuillas por sus papeles en "Inglourious Basterds" (2010) y "Django desencadenado" (2013), ambas dirigidas por el cineasta.