El presidente de Francia, Emmanuel Macron, en su primer discurso de la política de defensa dejo en claro que no va dejar a sus jefes militares sobornarlo.
Las fuertes palabras del mandatario fueron en respuesta a comentarios del General Pierre de Villiers quien durante un comité parlamentario dijo que no iba dejar que el gobierno lo tratara "como un cualquiera" cuando se trataba de recortes en el presupuesto militar.
El general estaba indignado por el recorte de 850 millones de euros (969 millones de dólares) al presupuesto militar de este año.
De acuerdo con dos fuentes parlamentarias, Viilers dijo, "No voy a permitir que me den por tonto. Puede ser que soy un estúpido, pero reconozco cuando me quieren ver la cara."
En su discurso enfrente de docenas de oficiales del Ejército y sus familias, Macron dijo, "Para mí no es digno hablar de este tipo de cosa en público. He hecho compromisos y yo soy su jefe".
Macron dejo claro que no iba a permitir que este tipo de crítica volviera a ocurrir.
"Lo que me gusta es el sentido del deber, el sentido de la discreción que ha llevado a nuestro Ejército a donde está hoy. Y lo que a veces encuentro difícil de tolerar en ciertos sectores, lo tolero aún menos cuando se trata de nuestros militares". Emmanuel Macron, presidente de Francia.
Esto resulto en que de Villiers renunciara su cargo el miércoles, es el primer jefe de Ejército que renuncia en 60 años.
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