Esta valiente chica logra robarle la flama a un encendedor, y ¡se la lleva entre los dedos!
Como puedes ver, primero advierte a quienes atestiguan lo que hace, diciendo que se trata de su truco de magia favorito, cuando de encendedores se trata.
Enciende el artefacto y con la yema de los dedos la toma y la separa de él. La sostiene un momento a una distancia considerable y, cuando se apaga, basta con que truene los dedos, para que la llama aparezca de nuevo en el encendedor.
WOW. ¿Habías visto algo así alguna vez?
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