El presidente francés, Francois Hollande, aseguró que Francia "no tendrá piedad" con los terroristas, que en la ola de atentados de esta noche en París causaron al menos 153 muertos.
Francia "no se dejará impresionar ante lo sucedido" y se mantendrá unida, declaró Hollande a los medios a su llegada a la sala de conciertos Bataclan, donde según testigos, ocurrió una "carnicería".
Después de la tragedia, el presidente francés declaró estado de emergencia y el cierre de fronteras en el país europeo.