Cada día hay que disfrutarlo al máximo porque no sabes cuándo será el último o cuándo estará cerca de estarlo.
Cuando salió a limpiar su entrada en Rusia, esta chica nunca se imaginó que iba a estar a nada de no contarla, pues fueron unos segundos la diferencia de seguir con vida, pues se movió en el momento exacto para esquivar un témpano de hielo que hubiera traído graves consecuencias.