A bordo del avión papal, el Papa Francisco aseguró este lunes que todos los muros caerán, pues no sirven para detener la migración entre las naciones sino, por el contrario, generan odio sin solucionar los problemas.
En un encuentro con periodistas a bordo de la aeronave que lo llevó de Filadelfia a Roma, al final de su viaje apostólico de ocho días por Cuba y Estados Unidos, dijo "ustedes saben cómo terminan los muros. Todos los muros caen, hoy, mañana, o dentro de cien años, pero todos caen. No es una solución. El muro no es una solución".
Al respecto de la crisis migratoria que azota a Europa por el arribo de miles de refugiados provenientes de Medio Oriente, el pontífice ahondó "los muros nunca son la solución. En cambio, los puentes sí. Siempre. Siempre. Eso es lo que pienso sobre los muros y las barreras. No son una solución. El problema permanece y permanece con más odio".
En su plática con los medios de comunicación a bordo, el líder de la Iglesia Católica habló de la situación actual que viven las distintas zonas geográficas del planeta, tales como los intereses económicos que existen detrás de la explotación del continente africano, el proceso de pacificación entre el presidente Juan Manuel Santos y las FARC en Colombia, así como el debate en Estados Unidos respecto a la libertad religiosa. Por último, el pontífice ratificó su deseo de viajar a China.