Para este hombre no hay imposibles y se nota en este vergonzoso acto.
Era tanto su deseo de obtener la bicicleta, que terminó serruchando el árbol de donde estaba encadenada para poder llevársela.
Realmente quería una bicicleta.
Para este hombre no hay imposibles y se nota en este vergonzoso acto.
Era tanto su deseo de obtener la bicicleta, que terminó serruchando el árbol de donde estaba encadenada para poder llevársela.
Realmente quería una bicicleta.