Las extorsiones telefónicas han evolucionado. Ahora las bandas dedicadas a este delito buscan en hoteles a sus víctimas y recurren al secuestro virtual. Se hacen pasar por delincuentes, policías municipales o agentes federales. La estrategia es causar pánico para obtener información personal, direcciones, números telefónicos y detalles de vehículos de los huéspedes.
Con engaños piden a sus víctimas que ya no contesten su celular, mientras buscan a sus familiares para hacerlos creer que los tienen secuestrados.
Pero en ocasiones van más allá. Ante las amenazas, los huéspedes acceden a tomarse fotos, simulando que están maniatados o sometidos por un grupo delictivo.
"Y entonces esas fotos les piden que se las envíen a sus familiares diciéndoles o indicándoles que están privados de la libertad, es decir, el engaño se ve reforzado por estas imágenes que mandan a través del teléfono". Patricia Bugarín, coordinadora Nacional Antisecuestros
Bugarín detalló que "hay personas que han hecho un depósito en un instante pensando que efectivamente su familiar está secuestrado".
Uno TV obtuvo un fragmento de una llamada real, en donde el delincuente ha conseguido hacer creer a una joven que tiene secuestrado a su padre y viceversa.
Enlaza la comunicación por medio de dos teléfonos celulares con el altavoz activado.
- Extorsionador: "A ver& levanta la cabeza& agarra el teléfono y habla con tu papá, mija".
- Hija: "Mande".
- Papá: "&¿Cómo estás mi amor?".
- Hija: (Inaudible)
- Papá: "Estoy bien".
- Hija: "Papi, soluciona esto por favor".
Las autoridades exhortan a la población a denunciar este tipo de llamadas al 911 y tener claves entre familiares para comunicar que están a salvo, como en este caso en donde terminaron colgándole el teléfono.
- Papá: "Estoy bien, estoy bien&vete a (clave), vete a (clave), vete a (clave)".
- Extorsionador: "¿Qué significa vete a (clave)?".
En el primer semestre del 2017, fueron denunciados 3 mil 321 casos, algunos de ellos con este mismo modo de operación.