Encontrar algún desperdicio o botella mientras caminas por una playa es algo común, sin embargo el océano se ha convertido en un contenedor de basura donde cada año más de ocho toneladas de plástico terminan flotando en sus aguas, de acuerdo con un reciente estudio publicado por el Programa de la Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Unep, por sus siglas en inglés).
Según este mismo organismo, en la actualidad, ya hay más de 150 millones de toneladas de desperdicios y para el 2050 los océanos tendrán más plástico que peces y aproximadamente el 99% de las aves marinas lo habrán ingerido en sus sistemas digestivos.
En los últimos 40 años, la cantidad de basura marina (solo en la capa superficial) aumentó más de un 100%. Las bolsas, tapones y fibras de ropa sintética, entre otros contaminantes, ingresan a los océanos mediante las alcantarillas y residuos urbanos, y ponen en peligro a más de 200 especies marinas.
Uno de los casos de contaminación extrema de los océanos fue denunciado por el Instituto de Ciencias del Mar y Limnología de la UNAM, quienes descubrieron una "isla de plástico", con más de 100 millones de toneladas de desechos flotando y contaminando el área al norte del Pacífico. El tamaño actual de la "isla de plástico", es de estados como Chihuahua o Coahuila, pero en un futuro podrían tener el de un continente.