Después del terremoto del pasado 19 de septiembre, se han controlado más de mil fugas en la CDMX, según declaró el Jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera.
Actualmente el gas natural y el gas LP están odorizados, es decir, tienen un olor particular que permite ser identificado fácilmente y en caso de pequeñas fugas, el gas puede llegar a disiparse rápidamente en la atmósfera. Sin embargo si se encuentra concentrado en recipientes, el riesgo puede ser inminente.
Aunque el mayor peligro ya pasó, la posibilidad de una réplica del sismo o un derrumbe involuntario mantiene la alerta encendida ante posibles fugas de gas.
Por eso, si sospechas que existe una fuga de gas toma en cuenta estos tres pasos:
- Identifica
Mantén bien identificadas todas las instalaciones de gas que existen en el inmueble, considera estufas, cilindros o tanques de gas, calentadores, etcétera.
- Monitorea
Revisa que los contenedores de gas no tengan golpes o abolladuras, ya que por la corrosión puede existir riesgo de fuga. Las perillas de estufa y calentador mal colocadas también pueden ser peligrosas.
- Evalúa el riesgo
Si consideras que el riesgo es bajo, la Secretaría de Protección Civil recomienda reparar el daño inmediatamente a fin de eliminar riesgos, una forma de saberlo es colocar agua con jabón en las conexiones de gas y observar si hay pequeñas burbujas, pero, si crees que el riesgo es mayor, evacúa inmediatamente y repórtalo a las autoridades correspondientes.
Para reportar emergencias o problemas con fugas de gas, puedes comunicarte a los siguientes números:
- Protección Civil: 5683-2222
- Locatel:5658-1111
- Bomberos: 5768-3800
- Emergencias: 911
¿Fuiste afectado por el sismo o tienes algún familiar desaparecido?
Comunícate al 911 y Locatel 56 58 11 11 ó desde tu celular *1111