La Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) negó un amparo que solicitó el narcotraficante Rafael Caro Quintero, con el que pretendía lograr su libertad absoluta.
Con el voto en contra del ministro José Ramón Cossío, la primera sala resolvió la sentencia que le impuso un tribunal colegiado por la privación ilegal de la libertad, en la modalidad de secuestro y homicidio calificado, contra el agente de la DEA, Enrique Camarena Salazar, y el piloto mexicano Alfredo Zavala Avelar.
Ante sus compañeros, el ministro Cossío señaló que lo procedente era conceder la libertad absoluta a Caro Quintero, a quien se le giró de nuevo órdenes de aprehensión por el fallo de un tribunal colegiado del 23 de enero de 2013.
Explicó que se violó el debido proceso en su contra por no haber sido juzgado dentro de un plazo razonable, tras 26 años de prisión preventiva, y porque no hay certeza en las pruebas obtenidas en su contra, las cuales fueron producto de tortura.
Advirtió que el agente del Ministerio Público es responsable de probar toda duda, sustentar toda acusación con pruebas legalmente obtenidas.