Estos autos pasaron a la historia por su diseño horrible (fotos y detalles)

Aunque el diseño automotriz suele ser sinónimo de elegancia e innovación, algunos modelos han pasado a la historia no por su rendimiento ni por su tecnología, sino por tener un aspecto visual que causó polémica o rechazo masivo.
Aquí te contamos cuáles son algunos de los autos más feos de todos los tiempos y por qué sus fabricantes tomaron decisiones que terminaron siendo errores.
Los 5 autos más feos de la historia y por qué nadie los quiso
1. Pontiac Aztek (2001-2005)
El Pontiac Aztek se convirtió en un ícono… de lo que no se debe hacer en diseño automotriz. Su carrocería angular, líneas desproporcionadas y una parte trasera que parecía inacabada lo hicieron blanco de burlas. A pesar de su enfoque familiar y funciones innovadoras como una casa de campaña integrada, el mercado no lo perdonó.
General Motors introduces its newest model, the Pontiac Aztek.
— 2000 Live (@25YearsAgoLive) March 4, 2025
It is immediately panned by critics as one of the ugliest cars of all time. pic.twitter.com/QGBcnrWBM3
¿Por qué fracasó?
Por su diseño extraño, alto precio y una campaña publicitaria que no conectó con el público joven.
2. Fiat Multipla (1998-2010)
Este modelo fue diseñado para ser un monovolumen funcional y económico para familias. El problema fue que su estética no convenció: tenía dos niveles de luces frontales, un parabrisas corto y una forma bulbosa que muchos comparaban con una rana.
Voy a hacer un hilo sobre el coche más feo e incomprendido (de esto entiendo) de la historia: El Fiat Multipla. pic.twitter.com/VtfqOgKMEQ
— El Chumo (@ChumyTheWicked) June 12, 2019
¿Por qué fracasó?
Por su apariencia poco convencional, que aunque era práctica, afectó seriamente su aceptación en mercados como el italiano y el británico.
3. Nissan S-Cargo (1989-1992)
Inspirado en los caracoles, este microvan fue pensado para pequeños negocios en Japón. Su nombre incluso hace un juego de palabras entre “escargot” (caracol en francés) y “cargo”.
¿Cuál es el mejor nombre que se le ha puesto a un auto?
— Gabo Salazar (@gabosalazar21) December 10, 2024
Empiezo yo: en Japón existió un pequeño auto de carga fabricado por Nissan que se llamó S-Cargo.
Les adjunto la foto para que entiendan la genialidad 🤣🤣🤣 pic.twitter.com/UkgN2TOL2U
¿Por qué fracasó?
Aunque tenía su encanto retro, el diseño era demasiado caricaturesco para un vehículo comercial y nunca fue exportado de forma masiva.
4. AMC Gremlin (1970-1978)
El AMC Gremlin intentó ser un compacto revolucionario en EE. UU., pero su forma de “auto cortado a la mitad” no convenció. Parecía que le faltaba una parte trasera, y su diseño no logró evolucionar con el tiempo.
Whenever I hear about kale, I remember that even the AMC Gremlin had a brief heyday. pic.twitter.com/Pcr3Mw4LnD
— Steve Olivas (@steveolivas) July 6, 2016
¿Por qué fracasó?
Por su estética desproporcionada, baja calidad y escasa eficiencia en combustible en una época donde eso comenzaba a importar más.
5. Tatra 603 (1956-1975)
Diseñado en Checoslovaquia, este sedán era usado por altos funcionarios del gobierno. Tenía una forma muy peculiar con tres faros delanteros y una trasera en forma de gota. Aunque era aerodinámico, su estilo no gustó fuera del bloque soviético.
Tatra 603, 1967 pic.twitter.com/yYWk0oEm6Y
— HariSeldn (@HariSeldn) March 15, 2025
¿Por qué fracasó?
Aunque fue innovador técnicamente, su diseño futurista y poco occidental lo marginó del mercado global.
¿Puede un auto feo volverse un clásico?
Curiosamente, muchos de estos vehículos que fueron considerados autos feos y fracasados en su momento hoy son valorados por coleccionistas. El tiempo y la nostalgia han hecho que incluso modelos como el Pontiac Aztek —impulsado por su aparición en series como Breaking Bad— ganen un segundo aire.
A principios de este siglo esta cosa, Aztek de Pontiac, me parecía fea, comparada con la Cybertruck, es una belleza! pic.twitter.com/rNLTHEm9GZ
— Marcela Mejía (@marcemeri641) April 7, 2025
La moraleja: en la industria automotriz, el diseño es tan importante como la funcionalidad. Un modelo puede tener la mejor tecnología, pero si el aspecto visual no conecta con el público, el fracaso comercial es casi inevitable.