Adopta un ajolote, UNAM lanza campaña “AdoptAxolotl” para preservar este animal

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“AdoptAxolotl” es el nombre de la campaña de la UNAM. | Foto: Cuartoscuro.

“AdoptAxolotl” es la nueva campaña de recaudación de fondos de la UNAM en beneficio de los ajolotes mexicanos, mediante la cual es posible apoyar desde un ejemplar hasta una casa de ajolotes o su refugio-chinampa.

Debido a que el ajolote (Ambystoma mexicanum), una especie de importancia natural y cultural de México, se encuentra en peligro de extinción en su ecosistema natural debido a que es una zona contaminada y afectada por aguas en mal estado, turismo irresponsable y especies de peces introducidas como la carpa y la tilapia que depredan al anfibio nacional, expertos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), trabajan desde hace 20 años en el rescate de Xochimilco y en la conservación del ajolote.

Sin embargo, para continuar su trabajo en chinampas-refugio que mantienen una barrera contra los depredadores de ajolotes, así como las labores con los chinamperos del lugar que participan en actividades agrícolas tradicionales y en cuidado de estos refugios, la máxima casa de estudios de México lanzó la campaña internacional de recaudación de fondos “AdoptAxolotl”.

¿Cómo adoptar un ajolote?

Existen dos esquemas mediante los cuales se puede adoptar un ajolote, según explicó Diana Laura Vázquez Mendoza, coordinadora de la campaña:

  1. “Invita a cenar a un ajolote”: mediante este esquema se apoya los insumos del mantenimiento de la colonia.
  2. “Tunea la casa del ajolote”: esquema dirigido al mantenimiento de chinampas-refugio en Xochimilco.

Para ser parte de “Adoptaxolotl” se puede visitar el sitio de la Tienda de la UNAM, donde es posible encontrar todos los paquetes y realizar la compra de forma segura.

¿Cuánto cuesta adoptar un ajolote?

Los montos para “adoptar virtualmente” un ajolote van de los 200 a los mil pesos.

Con 200 pesos se puede invitar a cenar a un ajolote, con mil tunear su casa y, si se desea donar más recursos, se puede adoptar un ejemplar o su casa por uno o seis meses y hasta por un año”, explicó Vázquez Mendoza.

La experta también detalló que dependiendo de la donación, se recibirán posters informativos, postcards, ponerle nombre a un ajolote o a las chinampas-refugio en un esfuerzo por personalizarlas.

¿Por qué adoptar un ajolote?

Según el último censo realizado por los expertos en 2014, solamente hay 36 ajolotes por kilómetro cuadrado en Xochimilco, mientras que en décadas pasadas había miles y luego cientos de individuos.

Para resolver este problema, se reactivan en la zona las chinampas, con el proyecto refugio-chinampa, que desarrolla una serie de filtros que mejoran la calidad del agua y el hábitat del ajolote.

Actualmente, la UNAM y los chinamperos trabajan con 48 chinampas-refugios, que corresponden a poco más de cinco kilómetros lineales de canales, en donde el ajolote y otras especies pueden vivir sin amenazas.

¿Qué afecta a los ajolotes?

Los científicos han identificado tres situaciones que afectan a los ajolotes:

  1. La urbanización de Xochimilco
  2. La calidad del agua, llena de los residuos de una planta de tratamiento
  3. Las especies introducidas -carpa y tilapia- en las décadas de los setentas y ochentas del siglo pasado, con una visión de revolución verde
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