Así se les dice a las crías de estos 15 animales… ¿lo sabías?

¿Cómo se llama la cría de un oso, una liebre o una víbora? Aunque algunas respuestas parecen evidentes, otras sorprenden incluso a los hablantes nativos. En el español, los nombres que reciben las crías de los animales son tan variados como el propio idioma, y en muchos casos dependen del contexto, la región o el uso histórico de la palabra.
Muchos términos han llegado hasta nosotros a través del lenguaje coloquial, la literatura o las tradiciones populares. Otros, en cambio, han quedado relegados a un uso técnico o local, lo que hace que resulten casi desconocidos para gran parte del público.
A continuación, una selección de 15 animales cuyas crías forman parte del conocimiento colectivo, aunque algunos nombres puedan resultar inesperados.
Términos comunes de las crías de animales
Algunas denominaciones para las crías cuentan con un amplio reconocimiento y uso cotidiano en distintos países hispanohablantes:
Ballena – Ballenato: término ampliamente difundido y de uso internacional
Oso – Osezno: registrado con firmeza en el vocabulario escolar y mediático
Oveja – Cordero: uno de los términos más antiguos y con fuerte carga cultural
Paloma – Pichón: además de su acepción literal, también se aplica de forma figurada
Caballo – Potro/Potrillo: ambos aceptados por la RAE, con potrillo como forma diminutiva y afectiva
Conejo – Gazapo: término con doble sentido, ya que también designa errores de habla o escritura
En estos casos, el vínculo entre adulto y cría es fácilmente reconocible gracias a su difusión en la lengua hablada, los medios y la literatura infantil.
Nombres que generan sorpresa
Otras crías poseen denominaciones menos comunes o incluso desconocidas para gran parte del público, lo que añade un componente de sorpresa y refleja la diversidad lingüística del idioma:
Víbora – Viborezno: término escasamente documentado fuera de contextos técnicos o literarios
Cigüeña – Cigoñino: nombre poco popular, pese a la popularidad del ave en el imaginario popular
Cabra – Caloyo: variante regional que convive con otras formas más frecuentes como cabrito, cordero, chivo o chivato
Gorrión – Gurriato: designación de origen rural, reconocida pero en declive
Liebre – Lebrato: palabra específica para esta especie, usada principalmente en zonas de caza
Ciervo – Cervato: término técnico que no suele aparecer en el habla cotidiana
Otras acepciones
Águila – Aguilucho: término que designa tanto a la cría como a otras especies de aves rapaces
Ánsar – Ansarino: forma específica del ganso salvaje, poco conocida fuera de ambientes especializados.
Burro – Pollino: aceptado por la RAE, aunque clasificado como anticuado en ciertas acepciones
La coexistencia de varias formas para un mismo animal responde a diferencias dialectales, niveles de formalidad y evolución del uso.




