Hablar de Chichén Itzá es referirse a una de las siete maravillas del mundo que, aunque ha sido explorada ampliamente, aún guarda secretos que giran en torno, principalmente, a su imponente construcción central: “El Castillo“, pirámide dedicada al dios Kukulcán.
Si bien no hay datos concretos en torno a la época en qué se edificó la pirámide, la cual es conocida a nivel mundial por el fenómeno de luz que se registra en ella en el equinoccio, sí se vislumbra que fue después del periodo clásico maya.
¿Cuándo y cómo se construyó “El Castillo”?
Chichén Itzá – hoy zona arqueológica – era un centro ceremonial maya que se construyó en el llamado periodo clásico, entre los siglos V y X, sin embargo, sus edificaciones más importantes e imponentes se construyeron después del siglo X, cuando los toltecas la ocuparon.
Después del siglo referido, en Chichén Itzá se vivió una gran época de prosperidad que, al menos, duró dos siglos más, hasta que la civilización maya comenzó a desintegrarse.
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Se dice que para 1527, cuando llegaron los primeros conquistadores españoles a Yucatán, en los alrededores de Chichén Itzá sólo hallaron a familias desperdigadas gobernadas por algunos nobles que carecían de opulencia.
En aquella época fue cuando la imponente pirámide de Kukulcán, recién descubierta por los españoles, se ganó el mote de “Castillo”, en clara referencia a las construcciones que, por entonces, abundaban en Europa.
¿Cómo es la pirámide de Kukulcán y por qué asombra?
La construcción de la pirámide de Kukulcán aún sorprende a avezados arqueólogos y especialistas en la civilización maya, debido a sus siguientes características, las cuales algunos llaman extraordinarias:
- En su interior hay un cenote, recientemente descubierto, el cual sería, en la cosmogonía maya, el centro del universo al cual había que proteger
- Además de la estructura principal, la cual es visible desde el exterior, en su interior hay dos subestructuras más (pirámides más pequeñas). Una fue descubierta en los años 30 y la otra en 2016
- La pirámide tiene, en total, 365 escalones, uno por cada día del año. Cada una de sus cuatro lados tiene 91 escalones.
Datos técnicos
- La pirámide de Kukulcán tiene un templo rectangular en la cima, al cual se puede acceder por cualquiera de los cuatro lados
- “El Castillo” mide 55.5 metros de ancho y 24 metros de altura
- Cada lado de la pirámide cuenta con 52 tableros, el número del ciclo tolteca
El impresionante equinoccio en Chichén Itzá
El 21 de marzo, en el equinoccio de primavera y el 22 de septiembre, el de otoño, un fascinante fenómeno se observa en las escalinatas de “El Castillo”, cuando la sombra de una serpiente desciende por ellas.
Esos días, se proyecta la sombra de la serpiente de cuerpo ondulado, la cual baja desde lo alto del templo por la escalinata principal.
- El significado: La voz de especialistas es unánime al considerar que la bajada de la serpiente por la escalera de la pirámide fue planeada por los mayas para que se observase en cada equinoccio.
La serpiente representa a Kukulcán bajando a la tierra en temporada de labores agrícolas y la llegada de la lluvia.
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Para la mayoría, la sombra representa el conocimiento astronómico y arquitectónico que la civilización poseía, aunque hay voces discordes.
Hay estudios que demuestran que no hay más orientaciones arquitectónicas mayas que registren equinoccios astronómicos, además de que el fenómeno de la pirámide es observable durante varias semanas, por lo que algunos expertos consideran que la bajada de la serpiente por la escalera es mera coincidencia.
El debate continúa…
¿Para qué se construyó la pirámide de Kukulcán?
Cómo bien lo dice su nombre, la edificación más impresionante de la zona arqueológica de Chichén Itzá fue construida para rendir tributo al dios Kukulcán, el cual es representado por una serpiente.
¿Y quién es el dios Kukulcán?
Kukulcán es una deidad maya que tiene relación con la serpiente emplumada y que muchos investigadores consideran que se trata de Quetzalcóatl
La representación de una serpiente emplumada es generalizada en toda Mesoamérica. En el caso de Chichén Itzá, a esta se le asocia con el viento y el agua.
Las cabezas de serpiente son recurrentes en la estructura arquitectónica de la construcción.
Aunque “El Castillo” es evidentemente un templo en el que se adoraba a la deidad de la serpiente con plumas, el cenote descubierto recientemente en su interior supone que la construcción también servía para su protección, ya que probablemente la formación acuífera era vista como el centro del universo.
- El dato: Chichén Itzá significa “boca del pozo de los itzaes”, en alusión a los cenotes, los cuales para los mayas eran las entradas al inframundo.
Itzaes se refiere a “adivinos del agua” o al término “agua encantada”, aunque también se conoce así a un grupo de mayas que emigró a Yucatán en el siglo IV desde Petén.
