Un nuevo estudio reveló que la miel de abeja de los Estados Unidos contiene rastros de radiactividad producto de la lluvia ácida de los años 50 y 60.
No obstante, expertos señalaron que los niveles de radiactividad no son peligrosos para la vida humana, por lo que no son motivo de preocupación, según la Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés)
¿Por qué la miel de Estados Unidos es radiactiva?
Científicos del College of William & Mary en Williamsburg en Virginia, Estados Unidos encontraron rastros de radiocesio, una forma radiactiva del elemento cesio, en la miel de abeja recolectada en la zona este de aquel país.
De acuerdo con los expertos, los rastros radiactivos en la miel de Estados Unidos son consecuencia de las pruebas de bombas nucleares realizadas en las décadas de 1950 y 1960.
Y es que a raíz de la Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos, la ex Unión Soviética y otros países detonaron cientos de ojivas nucleares en pruebas aéreas. Dichas bombas expulsaron radiocesio a la atmósfera superior y los vientos lo dispersaron por todo el mundo antes de que cayera del cielo en partículas microscópicas.
Sin embargo, la distribución no fue uniforme, ya que según los investigadores muchas más precipitaciones cayeron sobre la costa este de Estados Unidos, debido al viento y la lluvia de la región.
Al caer el radiocesio a la tierra, las plantas pueden confundirlo con potasio, un nutriente vital que comparte propiedades químicas similares, ya que es soluble en agua.
¿Cómo se descubrió la miel radioactiva?
Con la intención de saber si las plantas continúan absorbiendo este contaminante nuclear, el geólogo James Kaste y sus alumnos recolectaron varios alimentos para estudiarlos, entre ellos, miel de la zona de Raleigh, Carolina del Norte.
Al realizar pruebas de radiocesio, los científicos encontraron que la miel de abeja contenía niveles de cesio 100 veces más altos que el resto de los alimentos recolectados.
Tras el hallazgo, Kaste y sus estudiantes recolectaron y analizaron 122 muestras más de miel cruda producida localmente de todo el este de los Estados Unidos, encontrando que 68 de las 122 muestras contenían radiocesio.
Las pruebas arrojaron que dicha miel contiene niveles radioactivos superiores a 0,03 bequerelios por kilogramo, aproximadamente 870 mil átomos de radiocesio por cucharada.
- Entre las muestras analizadas, la recolectada en La Florida, arrojó que contenía 19,1 bequerelios por kilogramo.
Sin embargo, los niveles de radiactividad no son peligrosos, ya que el límite para cualquier problema de seguridad alimentaria es de mil 200 bequerelios por kilogramo, según la FDA.
- Los expertos creen que los niveles de cesio en la miel fueron probablemente 10 veces más altos en la década de 1970.
Por su parte, Kaste aseguró no estar preocupado en absoluto y que los resultados del estudio no deben causar ninguna alarma sobre la miel de hoy.
“Como más miel ahora que antes de comenzar el proyecto. Y tengo hijos, les doy de comer miel “, dijo el geólogo investigador.