UNAM alerta por miel adulterada, así puedes saber si es o no natural

La miel natural, producida por las abejas tiene diversos beneficios a la salud, además de ser un alimento rico en vitaminas y minerales. Sin embargo, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) alertó sobre el consumo de este producto ya que una cantidad importante de la miel que consumen las personas no es natural y puede afectar la salud.

¿Cómo saber si una miel es natural o no?

De acuerdo con la UNAM, mucha de la miel que consumen las personas es miel artificial, la cual está adulterada con endulzantes o ser una mezcla de algún edulcorante con saborizante y colorante. De ahí que sea común que muchas personas lleven a cabo pruebas caseras que les permitan saber si se trata o no de miel de abejas.

Una de estas pruebas consiste en que si al voltear un frasco de miel, la burbuja se va despacio es miel pura y si se va rápido está adulterada. Otra prueba consta en coloca en un plato y meterlo al microondas, si se endurece es pura, pero si queda líquida no es buena.

Sin embargo, Ángel López Ramírez, académico de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la UNAM indicó que la única forma de reconocer un producto de calidad es a través de estudios de laboratorio especializados.

No obstante, destacó que una manera de saber si se trata de miel natural es que, cuando está a menos de 14 grados Celsius dura líquida de 14 a 15 días, pero después se cristaliza. En cambio, esto no ocurre con la miel artificial.

Diferencias entre miel natural y miel artificial

De acuerdo con Carrillo Miranda, una de las principales diferencias entre una miel que es natural y una que no lo es, es que la de origen natural pese a que contiene pocos azúcares, la miel de abeja posee un sabor dulce, a diferencia de la que es un edulcorante o un producto alterado de forma artificial.

Esto se debe a que “cuando es natural y de calidad tiene más levulosa que fructosa, por ello es 1.5 veces más dulce que la glucosa o el azúcar normal, lo que implica que se consumen menos azúcares”, dijo el experto.

Dos de los azúcares empleados en la fabricación de la miel artificial son la glucosa y fructosa industriales, productos obtenidos de la harina de granos como el maíz o arroz. Ambos se generan mediante un método de producción limpio donde el azúcar sale de forma líquida, sin aminoácidos ni minerales, a diferencia de la natural, que sí los presenta por el proceso realizado por las abejas al convertir el néctar en miel.

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