Cenicienta, la verdadera historia de la “princesa” donde no hay ratones y sí unas hermanastras sádicas

HISTORIA REAL DE CENICIENTA
Existen varias versiones sobre la historia de Cenicienta. | Foto: Shutterstock.

La historia de la joven Cenicienta que vivía con su madrastra y sus dos hermanastras muy malas, pero que un día conoció al hijo el rey con quien se casó y fue feliz para siempre, dista mucho de la versión original escrita por los hermanos Grimm.

La verdadera historia de la famosa princesa Cenicienta

Aunque existen diversos cuentos que aluden a la historia de Cenicienta, uno de los más retomados es el escrito por los famosos hermanos Grimm, quienes también escribieron cuentos como Rapunzel, Hansel y Gretel, La bella durmiente y Blancanieves.

En el texto de los hermanos Grimm, la historia de Cenicienta comienza con la muerte de la madre de ésta y el segundo casamiento de su padre con una mujer que llevaba consigo a sus dos bellas hijas, quienes maltrataban y obligaban a la joven a atenderlas y hacerse cargo de las labores de la casa.

“¿Esta estúpida tiene que estar en la sala con nosotras?”, “si quiere comer pan, que se lo gane”, eran parte de las ofensas que Cenicienta recibía por parte de su madrastra y hermanastras, según se narra en el cuento.

Un día, el padre de Cenicienta salió de viaje y a su regreso dio a su hija una rama de avellano que había cortado cerca de su casa, la cual Cenicienta sembró en la tumba de su madre donde creció hasta convertirse en un frondoso árbol. Ahí mismo conoció a un pajarito al que siempre que ella le pedía algo, éste se lo echaba desde arriba.

Posteriormente, según el cuento de los hermanos Grimm, el rey organizó una fiesta de tres días a la que fueron invitadas todas las doncellas bonitas del país, para que el príncipe heredero eligiese entre ellas una esposa. 

Sin embargo, a la celebración sólo asistieron las dos hermanastras, pues a Cenicienta se le prohibió asistir. Por ello, cuando ya no había nadie en casa, Cenicienta se encaminó a la tumba de su madre, bajo el avellano, y suplicó diciendo:

"¡Arbolito, sacude tus ramas frondosas,
y échame oro y plata y más cosas!"

Fue entonces cuando el pajarito que siempre ayudó a Cenicienta le echó un vestido bordado en plata y oro, y unas zapatillas con adornos de seda y plata, atuendo con el que acudió al baile real.

A su llegada, el príncipe salió a recibirla, y tomándola de la mano, bailó con ella. Al anochecer, Cenicienta escapó a su casa. Esto ocurrió durante los tres días que duró la celebración en el reino, pero en el último, Cenicienta perdió uno de sus zapatos, el cual fue recogido por el príncipe.

A la mañana siguiente, dice el texto, el príncipe se presentó en casa de Cenicienta diciendo: “mi esposa será aquella cuyo pie se ajuste a este zapato”.

Esto hizo que las dos hermanastras se alegraran, pues ambas tenían los pies muy lindos. Fue entonces que la mayor acudió a su cuarto para probarse la zapatilla, acompañada de su madre, pero como no había modo de introducir su dedo gordo decidió cortárselo y, reprimiendo el dolor, se presentó al príncipe.

Entonces, él la hizo montar en su caballo y se marchó con ella. Pero al pasar por el avellano, dos palomitas gritaron: “el zapato no le va. La novia verdadera en casa está”.

Esto hizo que el príncipe viera el pie de la hermanastra y notara que de escurría sangre, por lo que devolvió la muchacha a su madre. Fue entonces cuando la segunda hermanastra decidió probarse el zapato, pero el talón no entraba, por ello, también decidió mutilarse un pedazo de su pie y meterse a la fuerza el zapato, pero el príncipe también notó la sangre caer del pie de la mujer.

Al preguntar al padre de Cenicienta si había otra doncella en la casa, el hombre dijo que no, que sólo estaba la hija de su esposa difunta, quien era una joven sucia y pringosa. Ante la insistencia del príncipe, Cenicienta fue presentada y se probó el zapato, sentándole a la perfección.

Sin embargo, ahí no termina la historia, de acuerdo con el relato de los hermanos Grimm, el día de la boda de Cenicienta con el príncipe, las hermanastras estuvieron presentes pero un par de palomas les sacaron los ojos a picotazos.

La historia de Cenicienta, según Disney

Disney retomó la historia de Cenicienta llevándola a la pantalla grande en 1950, en ella, la compañía omitió algunos pasajes de la historia real y se centró más en la versión del escritor, Charles Perrault, la cual muestra un lado más compasivo hacia sus hermanastras, pues en el desenlace, éstas terminan casadas con dos hombres ricos y nobles de la corte. Siendo así, que todos vivan felices para siempre.

Etiquetas:

Qué opinas