¿Qué significa “kafkiano”, el adjetivo con el que la RAE recuerda a Franz Kafka?

| 11:36 | Lucía P Castillo | RAE/Larousse
Kafkiano
Foto: Shutterstock//IA.

La Real Academia de la Lengua Española (RAE) conmemoró el aniversario 142 del nacimiento de Franz Kafka, conocido escritor de obras como “La metamorfosis” y “El proceso”, recordando el término kafkiano.

El término kafkiano o kafkiana, tal como puede deducirse, deriva del apellido del escritor nacido en Praga el 3 de julio de 1883, Franz Kafka.

Pero, ¿qué significa kafkiano y cómo debe usarse correctamente?

Se trata de un adjetivo con tres posibles acepciones de uso. Éstas son:

  1. Perteneciente o relativo a Franz Kafka, escritor checo, o a su obra. Las novelas kafkianas.
  2. Que tiene rasgos característicos de la obra de Kafka. Una visión del mundo muy kafkiana.
  3. Dicho de una situación: Absurda, angustiosa.

Su uso correcto debe ser en minúsculas, sin cursivas y sin comillas, es decir:

kafkiano/kafkiana

Por ejemplo:

  • Uso correcto:

Esa reunión estuvo muy kafkiana.

  • Uso incorrecto

El nuevo libro de aquel escritor es muy “kafkiano”.

La palabra kafkiano fue incorporada en los diccionarios en el año 2001, aunque ya llevaba décadas en uso. Según el Pequeño Larousse ilustrado, se refiere a “una situación inquietante por su absurdidad o carencia de lógica, que recuerda a la atmósfera de las novelas de Kafka”.

En otras palabras, describe experiencias o contextos ilógicos, surrealistas y opresivos, con un tinte angustiante. Una situación kafkiana es aquella en la que pasa algo ilógico, casi surreal, que debe tener un componente escalofriante, explica Larousse.

¿Quién fue Franz Kafka?

Franz Kafka nació en Praga a finales del siglo XIX. Creció en el seno de una familia judía marcado especialmente por la complicada relación con su padre.

Debido a que la tuberculosis lo afectó a una edad temprana, siempre se dedicó a trabajos administrativos.

La vivencia en carne propia de la aburrida y extraña vida de oficinista en la burocracia austriaca, así como la relación complicada con su padre, lo llevaron a tratar en sus creaciones diversos temas relacionados con lo absurdo de la autoridad y sus mecanismos.

En vida publicó varias decenas de cuentos y sus famosos libros “La condena” y “La metamorfosis”.

A pesar de que su último deseo antes de morir fue que se destruyeran todos sus escritos. Afortunadamente esta petición no se llevó a cabo y puedes leer sus obras póstumas, como “El proceso”, “El castillo”, cientos de sus cartas, además de “Carta al padre”, obra fundamental para comprender la cosmovisión plasmada en su literatura.

Aunque su vida fue corta, las creaciones de Kafka influyeron, y lo siguen haciendo, a grandes plumas, como el caso de Albert Camus, Simone de Beauvoir y Jean-Paul Sartre. Estos escritores son algunos de los mayores representantes del existencialismo, corriente filosófica fundamental para entender qué significa kafkiano.

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