“Tongolele” simbolizaba el erotismo en una sociedad conservadora y Paquita la del Barrio encarnaba a la mujer que se defiende y no se deja pisotear: Rafael Pérez Gay
La cultura popular mexicana se vistió de luto con la partida de dos figuras emblemáticas: Yolanda Montes “Tongolele” y Francisca Viveros Barradas, más conocida como Paquita la del Barrio.
En una entrevista con el escritor y periodista Rafael Pérez Gay, en Noticias en Claro, se analizaron las trayectorias de estas mujeres que, desde sus respectivos ámbitos, marcaron la historia del entretenimiento en México.
Tongolele: un símbolo de la sensualidad y el cambio social
Rafael Pérez Gay destacó el impacto de Tongolele en la cultura mexicana, situándola como una figura esencial en la transición de un México rural a uno urbano en las décadas de los 40 y 50.
“Ella fue una figura canónica de las rumberas en México, que con su presencia en el cine y el cabaret transformó la moral social del país”, comentó.
A diferencia de muchas otras estrellas de la época, Tongolele vivió sus últimos años con serenidad y tranquilidad.
“No es común que una vedette de su magnitud termine su vida en paz y con dignidad”, expresó Pérez Gay, recordando cómo la veía en su vecindario, aun con su porte imponente y su esencia inconfundible.
Carlos Monsiváis, uno de los más grandes estudiosos de la cultura popular, dedicó varios ensayos a analizar el impacto de Tongolele en el cine y la moral social mexicana. Asimismo, el escritor Marco Levario profundizó en la historia de esta bailarina, nacida en Washington pero convertida en un ícono nacional. “No hablaba bien español, pero su arte trascendió cualquier barrera idiomática”, afirmó Pérez Gay.
Las películas en las que participó siguen siendo recordadas por su inconfundible estilo, en el que cada escena se detenía para permitirle “deslumbrar con sus movimientos hipnóticos… Su cadera nos desquiciaba”, bromeó Pérez Gay, destacando el impacto que tuvo en la sensualidad del cine mexicano.
Paquita la del Barrio: la voz de la mujer que no se deja
En el otro extremo del espectro cultural, Paquita la del Barrio representó una revolución en la manera en que la mujer mexicana se expresaba en la música.
“Si Tongolele simbolizaba el erotismo en una sociedad conservadora, Paquita encarnaba a la mujer que se defiende, que no se deja pisotear”, explicó Pérez Gay.
Con canciones icónicas como “Rata de dos patas” y “Tres veces te engañé”, Paquita no solo conquistó al público femenino, sino también al masculino: “Fue y seguirá siendo una figura fundamental de la cultura popular, porque transformó la sensibilidad sobre la mujer en la música ranchera”, afirmó el periodista.
Desde sus inicios, en un modesto bar, hasta convertirse en una de las intérpretes más queridas de México, Paquita dejó una huella imborrable en el imaginario colectivo.
“Así como José José o Juan Gabriel marcaron una sensibilidad masculina, Paquita lo hizo con la femenina, demostrando que la mujer también tiene voz y fuerza en la música popular”, concluyó Pérez Gay.
