La madrugada de este jueves, se escapó el grupo de migrantes judíos ortodoxos de la secta Lev Tahor, que permanecían en resguardo en las oficinas del Sistema Nacional para Desarrollo Integral de la Familia (SNDIF) en Huixtla, Chiapas.
Los hechos ocurrieron luego de que el grupo de personas que les llevaba comida a los miembros de su comunidad, esperaron a que abrieran la puerta y los menores y mujeres empezaron a empujar a los guardias de seguridad que estaban cuidando la puerta principal.
Entre gritos y empujones lograron salir los menores, mujeres y hombres que estaban alojados en el SNDIF en Huixtla, sin que hubiera presencia de fuerzas federales.
Judíos de secta Lev Tahor caminaron en la oscuridad
Apurados y con mucha prisa, revisando que no quedará nadie atrás, los migrantes judíos priorizaron sacar a los menores y mujeres a la salida del edificio del Centro de Atención al Tránsito Fronterizo de Huixtla para incorporarse a la carretera de donde caminaron lentamente en medio de la oscuridad.
Los migrantes tomaron la carretera con rumbo desconocido, en medio de la madrugada, ya que estaban desesperados de estar encerrados seis días sin que tuvieran respuesta de las autoridades federales para poderlos dejar salir.
Así detuvieron a los integrantes de la secta
En días pasados, mediante un operativo implementado en la ciudad fronteriza de Tapachula, elementos de la Fiscalía General de la República (FGR), detuvieron a Menachen “E.A.” y Moshe “J. R.”, presuntos líderes de la secta Lev Tahor (Corazón Puro en hebreo), grupo ultraortodoxo judío.
Un juez federal de México dio la orden de arrestar a varios líderes del grupo, cuyo campamento está situado a unos 17 kilómetros al norte de la ciudad de Tapachula, por la sospecha de participación en abuso a menores, después de una investigación llevada a cabo por la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO).
A la par de la detención de estos integrantes de la secta, un grupo de 17 personas, también miembros de la organización Lev Tahor, entre ellos menores de edad, fueron trasladados a las instalaciones del Sistema de Desarrollo Integral de la Familia (DIF) en el municipio de Huixtla, a unos 30 kilómetros de Tapachula.
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