La cuenta oficial de la Coordinación Estatal de Protección Civil (CEPC) dio a conocer el hallazgo de una enorme grieta ubicada en el municipio de Guadalcázar, San Luis Potosí; información preliminar indica que tiene una longitud de 500 metros.
¿Qué se sabe de la grieta en Guadalcázar, San Luis Potosí?
El pasado miércoles 26 de abril, a través de Facebook, la CEPC informó la aparición de una grieta en la comunidad de Pozas de Santa Ana, ubicada en la región del altiplano potosino.
La aparición de la grieta ha alarmado a los locatarios de la zona, pues se especula que tiene una profundidad de, al menos, 8 metros.
Autoridades estudian la grieta
Para atender el fenómeno de agrietamiento, elementos de la Coordinación Estatal de Protección Civil asistieron al lugar de los hechos; con ayuda del área de Geofísica, realizaron los estudios pertinentes para conocer el riesgo de ésta.
Los monitoreos y estudios pertinentes fueron realizados con un georradar, un instrumento que busca anomalías en el subsuelo, emitiendo un pulso radioeléctrico y escuchando su rebote.
Fue en este estudio donde se habría determinado la distancia de la grieta, la cual sería de medio kilómetro, es decir, 500 metros.
Medios locales reportan que Mauricio Ordaz Flores, titular de la dependencia, comentó que se especula que la grieta surgió debido a la prolongada sequía que está viviendo el altiplano potosino.
De ser el caso, el agrietamiento comenzó debido a la humedad del piso provocada por las recientes lluvias que llegaron a la localidad.
Se seguirá estudiando el caso para saber si existe la posibilidad de que se presenten más grietas en este espacio de la comunidad.
¿Qué es y cómo son los agrietamientos?
De acuerdo con el Instituto Politécnico Nacional (IPN), los agrietamientos geológicos se manifiestan por una serie de grietas en el suelo que se profundizan hacia el subsuelo.
Tienen forma alargada y abertura variable de unos pocos centímetros a varias decenas de centímetros. El conjunto de grietas puede adquirir una forma lineal que puede extenderse por cientos de metros a pocos kilómetros.
Suelen manifestarse junto con hundimientos del suelo, socavones, colapsos del subsuelo por licuefacción, corrimientos de tierra y oquedades.
Las aberturas del subsuelo, corrimientos de tierra y desniveles del suelo se transmiten a las edificaciones, generando cuarteaduras en su estructura y desplomes. De ahí, la peligrosidad de este fenómeno en las zonas urbanas.
