¿Sabes quién inventó los panuchos? Así nació este antojito yucateco
Los panuchos son uno de los antojitos más emblemáticos de la gastronomía yucateca, su mezcla de sabores intensos, texturas crujientes y raíces populares ha convertido este platillo en un símbolo culinario del sureste mexicano.
Pero más allá de su irresistible sabor, los panuchos tienen una historia ligada a la creatividad callejera y al legado de la cocina maya.
Un origen popular con sabor a leyenda
De acuerdo con Explore.mx, los panuchos surgieron en Mérida, Yucatán, en el siglo XIX, específicamente en el barrio de la Ermita de Santa Isabel.
La leyenda cuenta que un hombre llamado Don Hucho ofrecía pan a los viajeros y comenzó a experimentar con una versión más sustanciosa: una tortilla inflada rellena de frijol que posteriormente se freía y se servía con guisos calientes.
Por eso, el antojito empezó a llamarse “pan de Don Hucho”, que con el tiempo se transformó simplemente en “panucho”.
Esta misma historia es respaldada por Yucatán Today, que destaca cómo el platillo evolucionó de una preparación improvisada a una receta con identidad propia, ligada profundamente a la cultura del maíz y el ingenio yucateco. Incluso, en Cacalchén, localidad cercana a Mérida, se celebra cada año la Feria del Panucho en honor a esta creación.
¿Qué es un panucho?
Un panucho se elabora con una tortilla gruesa de maíz que se abre ligeramente por dentro y se rellena con frijoles refritos, luego se fríe en aceite hasta que queda dorada y crujiente por fuera, pero suave por dentro.
La base se corona con guisos como cochinita pibil, pollo deshebrado o huevo duro, y se acompaña con cebolla morada encurtida, lechuga, aguacate y salsa al gusto.
El blog Gastronomía Mexicana agrega que la clave del panucho está en el “hollejo” o capa inflada que se forma al freír la tortilla, lo que permite que el relleno de frijol se mantenga en su interior sin salirse.
Este detalle técnico es lo que diferencia al panucho de otras botanas similares, como los salbutes.
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La raíz del nombre puede venir también del término maya “p’an uh” que alude a algo inflado o abultado, lo que encajaría con la forma característica de esta tortilla frita.
Un antojito vigente
Hoy en día, los panuchos son parte indispensable de cualquier recorrido gastronómico por Yucatán, se pueden encontrar en mercados, fondas, ferias populares o reuniones familiares, y sus versiones modernas incluyen ingredientes como queso de bola, champiñones o incluso versiones veganas.
Su versatilidad y sabor los han convertido en embajadores de la cocina del sureste mexicano.
Receta de panuchos yucatecos con cochinita
Ingredientes
Para las tortillas rellenas:
- 2 tazas de masa de maíz
- 1 taza de frijoles negros refritos
- Aceite vegetal para freír
- Para el relleno:
- 300 g de cochinita pibil deshebrada (puede ser pollo o carne al gusto)
- 1/2 cebolla morada fileteada y encurtida en jugo de naranja agria o vinagre
- 1 aguacate en rebanadas
- Lechuga finamente picada
- Salsa de chile habanero o al gusto
Preparación
- Prepara las tortillas: forma bolitas de masa y aplánalas en una prensa para tortillas. Cocina cada una por ambos lados en un comal caliente. Antes de que enfríen por completo, haz una pequeña abertura por un costado y rellena con frijoles refritos.
- Fríe las tortillas: una vez rellenas, fríelas en aceite caliente hasta que estén doradas y ligeramente infladas. Escúrrelas en papel absorbente.
- Monta los panuchos: coloca sobre cada tortilla frita una porción de cochinita, un poco de lechuga, cebolla morada, rebanadas de aguacate y salsa al gusto.
- Sirve calientes: acompaña con una bebida refrescante como agua de chaya o horchata para completar la experiencia yucateca.
