¿Por qué es una buena idea dejar tus zapatos y tenis en la puerta de tu casa?
Dejar tus zapatos o tenis en la puerta de tu casa puede tener beneficios a la salud, conoce más detalles y la explicación científica.
¿Por qué es bueno quitarse los zapatos al entrar a casa?
Quitarse los zapatos al entrar a una casa puede parecer una costumbre cultural o preferencias personales, pero las investigaciones científicas sugieren que es un hábito más inteligente de lo que se cree.
- Esta acción obedece a un tema de salud, seguridad y a mantener higiene en el espacio en el que se habita.
Generalmente la suciedad que hay debajo de los zapatos es poco visible, pero es más tóxico de lo que se piensa, el calzado de exterior contiene bacterias, alérgenos y sustancias químicas tóxicas, muchas de las que se relacionan a problemas de salud.
Haz la prueba e imagina dónde usas los zapatos cada día, desde baños públicos, parques, pasillos de hospitales, jardines o que has pisado lugares con productos químicos como herbicidas e insecticidas.
De acuerdo con un estudio de la Universidad de Arizona, el 96% de los zapatos dieron positivo en la prueba de bacterias coliformes, presentes comúnmente en materia fecal. Mientras que el 27% de estos tenía E. coli, una bacteria relacionada con diversas infecciones, algunas de estas mortales.
Si bien ciertas cepas de E. coli son inofensivas, otras pueden producir toxina Shiga, la cual causa desde diarrea con sangre hasta el síndrome hemolítico urémico, una grave afección que puede provocar insuficiencia renal.
Los niños menores de cinco años son particularmente vulnerables debido a su sistema inmunológico aún en desarrollo y al contacto frecuente de sus manos con la boca.
Pero la E. coli no es el único visitante indeseado que puede llegar a tu sala. Otros gérmenes como Clostridium difficile,conocido por causar diarrea severa, y Staphylococcus aureus, incluyendo la peligrosa cepa resistente a antibióticos (SARM), pueden esconderse en las suelas y trasladarse fácilmente al interior de tu hogar.
Estudios han encontrado que los zapatos también transportan pesticidas, herbicidas, metales pesados como el plomo y alérgenos como el polen; estos contaminantes pueden comprometer la salud de todos en casa, pero especialmente de los niños pequeños y las mascotas, quienes pasan más tiempo cerca del suelo y tienden a llevarse las manos (o patas) a la boca.
La exposición al plomo, por ejemplo, puede dañar el desarrollo cerebral de los niños y causar efectos cognitivos permanentes.
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Además, los selladores de asfalto usados en calles y entradas contienen compuestos cancerígenos que, según investigaciones, pueden acumularse en el polvo del hogar en niveles hasta 37 veces superiores a los del exterior.
Frente a esta evidencia, lo que parece una costumbre menor como quitarse los zapatos al entrar, se convierte en una forma sencilla pero poderosa de proteger a tu familia. Instaurar una política de “zona libre de zapatos” en casa, ofrecer pantuflas para los invitados o simplemente colocar un zapatero cerca de la entrada puede marcar una gran diferencia.
Como señala la profesora Manal Mohammed, microbióloga médica de la Universidad de Westminster: usar zapatos de exterior dentro de casa es, en esencia, invitar a las calles, “y a todo lo que traen consigo” a tus espacios más íntimos.
