¿Qué es lo que provocas realmente cuando soplas un diente de león?
Soplar un diente de león puede parecer un gesto inocente, incluso mágico, ya que muchos lo asocian con pedir deseos, pero detrás de esta tradición hay un fenómeno natural fascinante que tiene todo que ver con la ciencia y la supervivencia de las plantas.
Los dientes de león son conocidos por su forma esférica blanca, pero debes saber que en su etapa temprana son de color amarillo, como las plantas que se pueden ver por todos lados en la primavera.
Las flores con pétalos amarillos, que se llaman lígulas, corresponden a una única flor hermafrodita, tienen pequeñas partes curvas que son el extremo del órgano sexual femenino y cuyo interior se desarrollará un único fruto o semilla.
La fase intermedia del proceso se puede ver a la base de la inflorescencia la están envolviendo durante la maduración del fruto.
Cada semilla tiene un pequeño filamento que acaba en un penacho de pelillos de color blanco denominado vilano, y que ayuda a la semilla a disepersarse en el terreno por acción del viento.
Es por eso que cuando soplas un diente de león, lo que haces en realidad es ayudar a sus semillas lleguen más lejos y se reproduzcan.
La estructura esférica que parece una bolita blanca es una infrutescencia, compuesta por decenas de semillas conocidas como aquenios, cada una unida a un paracaídas natural llamado vilano. Al soplar, liberas esas semillas al viento, y si las condiciones son adecuadas, cada una puede germinar y convertirse en una nueva planta.
Este mecanismo de dispersión se llama anemocoria, es decir, el uso del viento para transportar semillas.
Gracias a esta estrategia, los dientes de león pueden colonizar nuevos espacios con mucha eficacia. No en vano, se consideran una de las plantas más exitosas del mundo, capaces de crecer en aceras, campos, jardines y hasta en condiciones poco favorables.
Así que la próxima vez que soples un diente de león, más allá de pedir un deseo, estarás ayudando al ciclo reproductivo de una planta experta en expandirse por el mundo.
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