¿Te gusta explotar burbujas de plástico o jugar con tu cabello? Se trata de fidgeting, qué significa

| 10:00 | Georgina Becerril | Europa Press
¿Te gusta explotar burbujas de plástico o jugar con tu cabello? Se trata de fidgeting, qué significa
¿Que significa que te guste romper burbujas de plástico?

Explotar burbujas de plástico de empaques, girar un bolígrafo entre los dedos o jugar con el cabello podrían no ser solo distracciones, sino tratarse de fidgeting. Según la divulgadora científica Teresa Arnandis, doctora en Biomedicina, estas acciones automáticas cumplen una función clave en el bienestar mental, al ofrecer un estímulo sensorial que regula el cerebro.

Aunque muchas veces se ven como muestras de inquietud o falta de atención, lo cierto es que estos movimientos, conocidos como fidgeting, ayudan a mejorar la concentración y reducir la ansiedad. Esto se debe a que el cerebro responde positivamente a estímulos repetitivos y simples.

¿Por qué explotar burbujas calma la mente?

Arnandis explica que explotar burbujas de plástico genera una combinación de estímulos que el cerebro interpreta como gratificantes, como el sonido del estallido, la presión con los dedos y la respuesta inmediata de satisfacción. Es el mismo principio que hace efectivas las pelotas antiestrés o los juguetes sensoriales.

¿Que significa que te guste romper burbujas de plástico?
Romper burbujas de plástico puede ayudar a calmar la ansiedad.

Incluso, menciona que se han desarrollado experiencias de realidad virtual para imitar esta sensación como parte de terapias motoras. Un estudio publicado en Scientific Reports en 2024 (Pelosi et al) respalda este uso, especialmente en personas con movilidad reducida.

Los estímulos táctiles y auditivos del fidgeting funcionan como una herramienta para reducir el estrés y mantener el enfoque. Son una forma simple de darle al cerebro lo que necesita sin recurrir a técnicas complicadas.

Beneficios del fidgeting para la concentración

La ciencia también apoya esta idea. Una investigación de la Universidad de Auckland y el Instituto de Investigación Médica Matai, en Nueva Zelanda, concluyó que estos movimientos mejoran la actividad cerebral vinculada a la toma de decisiones y atención.

El estudio, liderado por Justin Fernández y Samantha Holdsworth, mostró que manipular objetos o mover las manos aumenta el flujo sanguíneo en la corteza prefrontal, la región del cerebro encargada del control ejecutivo. Aunque se enfocaron en personas con TDAH, los beneficios se extendieron a quienes no tienen ese diagnóstico.

Romper burbujas de plástico: ¿una técnica para combatir el estrés?

Más allá del enfoque en la concentración, otro estudio, publicado por el psicólogo KM Dillon en PubMed, analizó el efecto del plástico de burbujas sobre el estrés.

El experimento, hecho con universitarios, reveló que tras manipular este material, los estudiantes se sentían más tranquilos, menos cansados y con mayor energía.

La investigación destacó además lo accesible que es esta técnica, ya que no requiere entrenamiento y evita los efectos secundarios que algunas personas sienten con técnicas de relajación más complejas.

Fidgeting: una herramienta simple con un impacto real

Lejos de ser sólo una distracción infantil, acciones como explotar plástico de burbujas, mover bolígrafos o hacer garabatos, son respuestas que el cerebro utiliza para autorregularse.

Como resume Teresa Arnandis, “más allá de la diversión, estos juegos cumplen una función real en nuestro estado mental”.