François-Philippe Champagne, ministro de Relaciones Exteriores de Canadá, estimó este domingo a través de una carta difundida en redes sociales que la victoria del demócrata Joe Biden en las elecciones presidenciales de Estados Unidos es “una buena noticia” para Canadá: “Creo que Joe Biden y la vicepresidenta (Kamala) Harris escucharán, aportarán mayor estabilidad y previsibilidad a nuestra relación”.
Congratulations @JoeBiden, @KamalaHarris
— François-Philippe Champagne (FPC)pic.twitter.com/l3NtqQ0YK2 (@FP_Champagne) November 7, 2020
El canciller de Canadá recibió con satisfacción que Joe Biden “hablara de ciencia” durante su discurso de victoria el sábado por la noche, y su promesa de crear, a partir del lunes, un comité de expertos para establecer un plan de lucha contra la pandemia de coronavirus (COVID-19). Expresó su deseo de que Ottawa y Washington D.C. trabajen juntos en cantidad de temas, como cadenas de suministro, frontera común o vacunas COVID-19.
El funcionario de Canadá agregó con relación a la victoria de Joe Biden:
“Esta es la relación más importante que tiene Canadá. Ya sea en la escena internacional, en nuestra relación bilateral, esta es una buena noticia y podremos trabajar muy bien. Ya se trate del cambio climático, del gran desafío que tenemos con el COVID-19, o la reconstrucción de la economía, soy muy optimista”.
François-Philippe Champagne.
Un comercio bilateral en juego
Estados Unidos es el principal socio comercial de Canadá y la frontera que ambos comparten (la más larga del mundo) está cerrada desde el comienzo de la pandemia del COVID-19, y así permanecerá al menos hasta el 21 de noviembre. El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, fue uno de los primero en felicitar a Joe Biden y a Kamala Harris por su victoria, menos de una hora después de que fuera proyectada.
Joe Biden tras su victoria
Tras celebrar su victoria frente a Donald Trump, Joe Biden se enfocó en preparativos de su llegada a la Casa Blanca con dos prioridades: la lucha contra el COVID-19 y la reconciliación de un país dividido. El demócrata recibió felicitaciones de varios dirigentes de todo el mundo (con excepciones como México y Brasil) mientras el mandatario saliente no le concedió la victoria, alegando “fraudes” en la elección, sin aportar pruebas.
