La bomba de fabricación casera utilizada en el atentado fallido en un taxi de Liverpool estaba cargada con metralla y habría causado “heridas graves o la muerte” si se hubiera detonado correctamente, informó la Policía británica.
El iraquí Emad Al Swealmeen, de 32 años, detonó la bomba, sentado como pasajero en el taxi frente a un hospital de mujeres el pasado domingo, durante las tradicionales conmemoraciones en el Reino Unido por las víctimas de las guerras.
La Policía está tratando la explosión como un acto de terrorismo, en el que murió el principal sospechoso y resultó herido el taxista, aunque todavía no se ha identificado ningún motivo ideológico, según la prensa británica.
La bomba fue fabricada con “explosivos caseros” y “se le adosaron bolas de metal, que habrían actuado como metralla”, explicó el viernes el jefe de la policía antiterrorista de la región, Russ Jackson.
“Si se hubiera detonado en otras circunstancias, creemos que habría causado heridas graves o la muerte”.
Russ Jackson, jefe de la policía antiterrorista de la región.
La policía británica sigue tratando de entender las circunstancias de la explosión, y no descarta la posibilidad de una detonación involuntaria, debida por ejemplo a los movimientos del taxi.
Las autoridades explicaron que Al Swealmeen había estado planeando su ataque “al menos” desde que alquiló una casa en abril. Pero según Jackson es “complicado” determinar cómo se adquirieron los componentes utilizados para fabricar el dispositivo, ya que “las compras se realizaron durante varios meses y Al Swealmeen utilizó muchos nombres”.
¿Qué ocurrió en Liverpool?
La explosión ocurrió poco antes de las 11 de la mañana durante las conmemoraciones a las víctimas de la guerra, en el llamado “Día del Recuerdo” en el Reino Unido. A pocos cientos de metros, soldados, veteranos y miembros del público estaban reunidos para un homenaje en la catedral de Liverpool.
Así te lo informamos:
Algunos tabloides y responsables políticos llamaron “héroe” al taxista, que resultó herido en la explosión, pero permitió, según ellos, evitar muertos. Según la policía, ya salió del hospital donde estaba siendo tratado.
Según el Daily Mail, el conductor se dio cuenta de que el pasajero era “sospechoso” y lo encerró en el taxi antes de escaparse.