¿Quién era José Mujica, el “presidente más pobre del mundo”?
José “Pepe” Mujica fue presidente de Uruguay entre 2010 y 2015, y se volvió famoso a nivel mundial por su estilo de vida humilde. Vivía en una casa de campo, conducía un Volkswagen escarabajo y donaba casi todo su sueldo presidencial. Por eso, medios internacionales lo apodaron el “presidente más pobre del mundo”.
A pesar de liderar un país, rechazó mudarse al palacio presidencial y prefería cultivar flores en su granja. Mujica fue un símbolo de sencillez y coherencia entre sus ideas y su forma de vivir.
Mujica: guerrillero, preso político y presidente
Antes de ser presidente, Mujica fue parte de una guerrilla urbana en los años 60 y 70. Por eso, pasó 13 años preso, muchos en condiciones muy duras. Al salir de la cárcel, se unió a la política democrática y llegó a ser senador, ministro y después presidente.
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Fue un referente del Frente Amplio, una coalición de izquierda en Uruguay. Durante su mandato, impulsó leyes que hicieron historia en América Latina, como la legalización del aborto, el matrimonio igualitario y el uso regulado de la marihuana.
¿Por qué lo admiraban en todo el mundo?
Mujica daba discursos sobre consumo responsable, justicia social y libertad, con un lenguaje sencillo y directo. Decía frases como: “No soy pobre, pobres son los que precisan mucho”. Fue invitado a foros internacionales, universidades y hasta al Parlamento Europeo, donde habló sobre el sentido de la vida más allá del dinero.
Aunque se retiró de la política en 2020, siguió siendo una figura respetada y querida por su coherencia. Para muchos, Mujica representó una forma diferente de hacer política: más humana, más ética y más cercana a la gente.
