Evita golpes de calor: guía para llevar a tu perro a la playa
Disfrutar del verano en la playa con tu perro puede ser una experiencia maravillosa, pero también implica ciertos riesgos que debes tener en cuenta. Las altas temperaturas, el agua salada y la exposición prolongada al sol pueden afectar gravemente la salud de tu mascota si no tomas las precauciones necesarias.
La veterinaria @mariavetican, conocida por compartir consejos útiles a través de TikTok, advierte que deshidratación, golpes de calor e irritaciones son problemas comunes durante una jornada en la costa. Para evitarlo, ha reunido cinco recomendaciones esenciales que ayudarán a que tu perro disfrute del mar de forma segura.
Hidratación constante y cero agua de mar
Uno de los mayores riesgos en la playa es la deshidratación, según @mariavetican, es fundamental llevar “mucha agua fresca”, ya que el calor y el consumo de agua salada pueden deshidratar al perro rápidamente, además, beber agua del mar puede provocar vómito y diarrea.
¿La solución? Llevar un bebedero portátil y ofrecer agua en intervalos frecuentes para mantener al peludo bien hidratado.
Sombra para prevenir golpes de calor
La exposición directa al sol, especialmente en perros de pelaje oscuro o razas braquicéfalas (como bulldogs o pugs), puede derivar en un golpe de calor. “Intenta que siempre tenga un sitio a la sombra donde resguardarse”, recomienda la veterinaria.
Una sombrilla, una carpa o incluso una toalla húmeda pueden ayudar a mantener al perro fresco y prevenir colapsos por temperatura elevada.
Protección solar y cuidado de las almohadillas
La arena caliente puede quemar las patas del perro, mientras que el sol puede dañar su piel, sobre todo si tiene zonas despigmentadas.
Por eso, es clave aplicar protector solar veterinario en áreas expuestas como la nariz o las orejas, y proteger las almohadillas con productos específicos.
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Este consejo es especialmente importante para perros de pelaje claro o piel sensible.
Supervisión en el agua y chaleco salvavidas
Contrario a lo que muchos creen, no todos los perros nadan bien. Algunas razas tienen dificultades por su peso o estructura corporal. “No asumas que todos los perros saben nadar bien. Eso no es cierto”, advierte.
Si tu perro no es muy hábil en el agua o se cansa rápido, considera ponerle un chaleco salvavidas para mayor seguridad.
Enjuague final para evitar irritaciones
Al finalizar el día, es importante eliminar los restos de arena y sal de su cuerpo. Dejarlo así puede provocar dermatitis o irritaciones. Lo ideal es enjuagarlo con agua dulce, ya sea en casa o en una ducha cercana a la playa.
Este paso sencillo es clave para prevenir infecciones cutáneas y mantener su piel sana.
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