Reseña de El Teléfono Negro 2: Una propuesta visual reinventada.

| 19:38 | Ernesto Ruiz Del Carmen | Nación Gamer
El Teléfono Negro 2: Una buena película de teror | Universal Pictures
El Teléfono Negro 2 trae una propuesta diferente y eficaz | Universal Pictures

El Teléfono Negro 2 regresa con su mezcla de horror, suspenso y elementos sobrenaturales con Finney y Gwen enfrentando nuevos terrores. Esta secuela expande el universo original con ambientes escalofriantes y una propuesta visual más ambiciosa, manteniendo el tono emocional que hizo destacar a su antecesora.

¿De qué trata El Teléfono Negro 2?

Han pasado varios años desde que Finney logró escapar de The Grabber. Ahora, con 17 años, carga todavía las secuelas traumáticas de su cautiverio. Su hermana Gwen, de 15 años, comienza a tener sueños inquietantes de una cabina telefónica en medio del hielo. En esas visiones, tres chicos aparecen siendo perseguidos en un campamento invernal llamado Alpine Lake.

Decidida a descubrir la verdad, Gwen convence a su hermano de viajar al campamento junto con Ernesto —hermano de una víctima anterior— durante una tormenta de nieve.

Allí descubrirán que el horror no solo regresó, sino que ha evolucionado: The Grabber encuentra nuevas formas de acechar desde el más allá y el campamento guarda oscuros secretos que conectan lo espiritual con lo físico.

Actuación y producción

Las actuaciones en El Teléfono Negro 2 resultan destacables, especialmente la de Madeleine McGraw como Gwen, quien equilibra vulnerabilidad y determinación con una presencia fuerte en pantalla. Mason Thames vuelve como Finney y aporta la carga emocional necesaria para mostrar cómo un superviviente lidia con el peso de su pasado. Ethan Hawke regresa como The Grabber; aunque su rol es algo más ambiental y etéreo que en la primera entrega, sigue siendo la presencia amenazante que mantiene la tensión viva.

En cuanto a la producción, el director Scott Derrickson deja claro que quiso elevar la ambición visual: escenas oníricas rodadas con estética de Super 8, ambientación invernal que potencia la sensación de aislamiento, diseño de sonido envolvente y efectos prácticos que intensifican los sustos. La atmósfera está bien trabajada, y muchas secuencias logran que lo sobrenatural y lo emocional se mezclen con fuerza.

En ocasiones, el guion de El Teléfono Negro 2 se acerca peligrosamente a la línea de lo ridículo, pero nunca llega a cruzarla. Hay momentos en los que las coincidencias, las revelaciones o los diálogos rozan lo exagerado, sin perder del todo la credibilidad. Y, curiosamente, es ahí donde la película encuentra parte de su encanto: juega con el límite entre lo absurdo y lo inquietante, manteniendo al espectador tenso pero entretenido. Esa delgada frontera entre lo creíble y lo fantástico se convierte en una herramienta efectiva para mantener la atención y darle al relato un tono casi de fábula oscura. Es imperfecta, sí, pero sabe cómo sostener su propio pulso sin romper el hechizo.

¿Vale la pena El Teléfono Negro 2?

El Teléfono Negro 2 es una secuela que, aunque no supera todos los tropiezos del pasado, logra entregar una experiencia de horror emocional sólida. Las actuaciones, la atmósfera visual y las ideas sobrenaturales hacen que valga la pena sumergirse en sus pesadillas. Si te gusta el terror con alma, con simbolismo y con sustos que no solo están en lo visible sino también en lo psicológico, esta película tiene lo necesario para dejar marca.