Expolicías mexicanos buscan integrarse al Ejército Ucraniano por mejor sueldo y oportunidades
Adrián López y Emmanuel Cachú, exintegrantes de la extinta Policía Federal, decidieron dar un giro radical a sus vidas: buscarán enlistarse en el Ejército Ucraniano para participar en la guerra contra Rusia. Tras 14 años de servicio en México, ahora se preparan para dejar el país y enfrentar un conflicto armado al otro lado del mundo.
Ambos aseguran que su situación laboral y económica los empujó a tomar esta decisión. Denuncian falta de oportunidades en México, especialmente por su pasado como policías federales. “Te hacen muchos peros”, afirma Emmanuel, mientras que Adrián agrega: “vas y buscas trabajo, pero ya no hay”.
[TE PUEDE INTERESAR: Rusia presume bombardeo a base aérea en Ucrania, pero denuncia ataque contra central nuclear]
Mexicanos buscan mejor vida combatiendo en Ucrania
Los expolicías cumplirían con los requisitos que solicita la Legión Internacional para la Defensa de Ucrania, que incluyen tener entre 18 y 60 años, buena salud física, capacidad de entrar legalmente al país y experiencia militar o policial.
Uno de los atractivos es el sueldo:
- 550 dólares mensuales en la línea del frente
- 1,100 dólares en zonas de peligro
- 4,800 dólares si son enviados a combate
Además, en caso de fallecer, el seguro de vida para sus familias asciende a 365 mil dólares, según datos oficiales del Ejército ucraniano.
Ya hay mexicanos combatiendo en Ucrania
Adrián calcula que al menos 90 expolicías mexicanos ya iniciaron trámites para sumarse a las filas ucranianas, y que 20 connacionales ya se encuentran en combate. Lamentablemente, dos de ellos han muerto en el conflicto, entre ellos Mario Alberto Lover, cuyo caso se abordará en una siguiente entrega.
Aunque el Ejército Ucraniano no los considera mercenarios, los aspirantes mexicanos reconocen que analizarían las ofertas de otros países si estas resultan más atractivas. “Te vas a donde te convenga más”, dice Emmanuel.
Pese a los riesgos, aseguran estar motivados y listos: “nos sentimos preparados y, además, allá te capacitan”, afirma uno de ellos. La guerra se ha convertido, para ellos, en una posibilidad de sobrevivir y darle una vida mejor a sus familias.