El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que en el caso Odebrecht no habrá persecución ni venganzas políticas, esto después de que Emilio Lozoya, ex director de Petroleoas Mexicanos (Pemex) ampliara su denuncia ante la Fiscalía General de la República (FGR).
En sus acusaciones, Lozoya señaló al expresidente Enrique Peña Nieto y a Luis Videgaray de utilizar sobornos en la campaña de 2012 para presuntamente afectar la candidatura de AMLO.
“La postura del Ejecutivo, mi postura, es que no haya persecución, que no haya venganzas políticas, que se aplica la ley, con rigor, con escrúpulos, que no se fabrican delitos, y al mismo tiempo que no haya impunidad, que se lleve a la máxima la práctica de que al margen de la ley nada y por encima de la ley nadie”.
Durante su conferencia de prensa mañanera desde Palacio Nacional, López Obrador recalcó que no conoce la información extra que presentó Lozoya y reiteró que su gobierno no ha presentado denuncias contra los exmandatarios.
Asimismo, el mandatario federal mencionó que no existe una consigna de él ni a favor en contra de nadie y pidió que haya confianza en las acciones de la Fiscalía General de la República, encabezada por Alejandro Gertz Manero.
“Esta situación debe darle tranquilidad a todos los ciudadanos incluso a los implicados porque se va a impartir justicia sin sesgos, sin tendencias, sin consignas en el mismo tiempo, repito, sin impunidad”, dijo.
“Nosotros no vamos a detener nada, pero no estamos presentando denuncia en contra de los expresidentes, eso debe de quedar claro, estamos cumpliendo con nuestro compromiso de no perseguir a nadie”, agregó.
AMLO indicó que uno de los directivos de la empresa brasileña reveló que los sobornos fueron entregados para obtener contratos, aunque recalcó que no sabía que los recursos se utilizaron para realizar una campaña en su contra en 2018.
En 2010, una sentencia de la Alta Corte estableció que no debía salir nunca de prisión.