San Martín de Porres fue un fraile dominico, primer santo mulato de América, nacido el 9 de diciembre de 1579, en Lima, Perú, en tiempos del Virreinato, al que se le conmemora el 3 de noviembre, fecha en la que murió, el año 1639, casi a los 60 años.
El día de su muerte, el 3 de noviembre, San Martín de Porres pidió a sus visitantes que rezaran el Credo, y la leyenda cuenta que él murió mientras eso ocurría. Se le representa con una escoba, “por su humildad”, y se le atribuyeron dones, como el de la bilocación: estar en dos lugares al mismo tiempo.
Además:
- Control sobre las plantas, que germinaban antes de tiempo
- Entrar y salir de lugares que estaban cerrados con llave o con tranca
- Control para que animales distintos convivieran en un mismo espacio
El 3 de noviembre
Su nombre real era Martín de Porres Velázquez y, según el sitio web de la Orden de Predicadores Dominicos, San Martín aprendió los oficios de peluquero, asistente de dentista y medicina natural desde los 12 años. Se le llama “el santo de la humildad” o “Fray Escoba”.
La Orden de Predicadores Dominicos agregó sobre quien murió el 3 de noviembre:
“El 2 de junio de 1603, hizo su profesión religiosa y fue cooperador. Destacaba por cuidar a enfermos. A todos amaba y curaba sin distingo de su procedencia étnica. Por sus cuidados pasaron todos los sectores de la sociedad limeña. Fue ejemplo de unidad en una sociedad fracturada por conflictos”.
San Martín de Porres
- “Hizo comer de un mismo plato a un perro, a un ratón y gato”, dicen varios medios especializados en la historia religiosa
La Orden de Predicadores Dominicos agregó que, este 3 de noviembre, lo que más se puede rescatar de la vida y obra de San Martín de Porres es su grandeza por pequeños actos cotidianos que modifican el entorno, así como “la sencillez, austeridad y humildad”.
