Seguramente habrás notado que algunos productos cuestan más al ser para mujeres que para hombres, sin ninguna razón aparente. A esto se le llama “impuesto rosa” y en Unotv.com te hablamos sobre él y qué hacer para evitar caer en él.
Aunque parece estar relacionado, no tiene que ver con eso de que las mujeres buscan un shampoo según su tipo de cabello mientras los hombres usan el mismo para lavar los trastes, la ropa y el coche, sino es más un tema de precios. Tampoco es realmente un impuesto que cobre el gobierno.
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¿Qué es el impuesto rosa?
Al respecto, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) define impuesto rosa, también llamado pink tax, como el sobreprecio a productos dirigidos al sector femenino. En comparación con los mismos para hombres, y sin justificación.
Agrega que donde más se presenta esta práctica es en los artículos de cuidado personal, higiene y ropa, que además registran campañas publicitarias, diseños y empaques enfocados en la mujer, siendo ésta la justificación de algunos expertos para la diferencia de precios.
Y es que, en 2019, la Profeco realizó un estudio en el que descubrió variaciones de hasta 17.2% en los precios de rastrillos desechables, con precios de 47.17 pesos en la versión femenina contra 40.24 pesos por el mismo paquete de dos artículos para hombre.
Mientras que, al respecto, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), citando a la Biblioteca del Congreso Nacional de Chile (BCN), este sobreprecio, que no debe tomarse como un impuesto, tiene que ver con la vinculación entre el hogar y la mujer, siendo ellas las más activas al momento de comprar.
Asimismo, por dichas razones las refiere como el objetivo de las campañas de publicidad ligadas a este tipo de productos, lo que, a su vez, se traduce en un mayor gasto en identidad y mercadotecnia para centrarse en el mercado femenino.
Además, la Condusef refiere también que el impuesto rosa también se encuentra en algunos productos financieros, como en el caso de los seguros médicos y de vida. Aunque en este caso, apunta, se debe principalmente a que estadísticamente las mujeres viven, en promedio, hasta cuatro años más que los hombres.
Ante ello, las instituciones destacan que, mientras sus aseguradas vivirán más tiempo, y por lo mismo pagarían más a lo largo de la póliza, también tenderán a enfermarse más que los asegurados, y de enfermedades diferentes a los hombres.
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¿Cómo evitar caer en el impuesto rosa?
Por otra parte, debido a que el impuesto rosa no es realmente un tributo cuyos recursos vayan a la Tesorería de ningún país, sí es posible evitar pagar las diferencias de precio, para lo que podrías seguir alguna de las recomendaciones de la Profeco.
De entrada, la institución refiere que, aunque sí hay productos con características propias según el sexo al que van dirigidos, en muchas ocasiones lo único que varía es el color de la etiqueta o el personaje que da imagen a la marca.
Compara
Como primera recomendación, tanto la Profeco como la Condusef destacan la importancia de comparar precios antes de decidirse por una de las opciones. Para esto se deben contemplar tanto las variedades de productos disponibles como los proveedores con quienes se pueden adquirir y si éstos se encuentran en oferta o si están disponibles por mayoreo.
Analiza
Después, analiza tus opciones de acuerdo con sus características y beneficios, identificando las diferencias, por ejemplo, en el caso de la versión de un producto para mujeres y otro para hombres, a fin de determinar si lo único distinto entre ambos es el color o la etiqueta.
Diversifica
Mientras que, por último, y con todos los datos a la mano, elegir la opción que realmente te convenga más, sin dejarte llevar porque la campaña es para mujeres cuando lo único diferente es que es color rosa. En este punto, incluso podrías buscar versiones neutras de los productos, como en el caso de los productos para bebés.
En tanto que, aunque en algunas ocasiones no se puede, como en el caso de los seguros médicos, que ya van hacia un perfil específico, la mayoría de las veces podrías optar por comprar la versión masculina, que aparte de ser más barata incluso podría resultar mejor.
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