Los 8 tips de la Condusef para hacerse del hábito del ahorro

La mayoría de las veces ya sea que tengamos un objetivo, o meramente para tener un “guardadito”, regularmente resulta complicado ahorrar, pues siempre salen cosas que nos desestabilizan, por lo que en Unotv.com te detallamos los 8 tips de la Condusef para que el ahorro se convierta en un hábito.

Incluso, estas recomendaciones las puedes aplicar lo mismo si sólo quieres dejar guardado el dinero bajo el colchón, en tu tarjeta de nómina o en un fondo de inversión, pues más que el instrumento, éstas van hacia el hecho de gastar de forma más inteligente.

¿Qué es el ahorro según la Condusef?

Respecto al ahorro la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) lo define como guardar una parte del ingreso para utilizarla en el futuro.

Agrega que ahorrar no es guardar lo que sobra, sino apartar desde la creación del presupuesto una cantidad fija, aunque sí pueden incrementarse reduciendo los gastos o aumentando los ingresos.

Asimismo, destaca que su importancia radica en que además de que se centra en el futuro, pueden preverse posibles riesgos, y solventarse, o aprovecharse en algo productivo.

¿Cómo convertir en un hábito el ahorro?

Siguiendo estos consejos no se te hará tan difícil llegar a tu meta. Foto: Pexels

Al destacar que los ahorros pueden servir para alcanzar metas a corto plazo, como realizar una compra; generar capital para invertir en un negocio o realizar una compra grande, como un auto o una casa; o tener un fondo para emergencias, la Condusef emitió estas ocho recomendaciones:

1. Analiza

Podría parecer obvio y repetitivo, pero una de las herramientas más importantes a la hora de ahorrar, y que nos ayudarán siempre, es el analizar cada gasto que realizaremos, cuidando de que éstos valgan la pena y que además sea adecuado el costo al beneficio.

Además, lo primordial es evitar las compras y gastos impulsivos, pues siempre son los que nos desestabilizan y que nos llegan bien a impedir llegar al final de mes, o a “tomar prestado” de nuestro siguiente sueldo.

2. Persevera

Una vez que le encuentras el modo al punto anterior, lo siguiente es no hacerlo a un lado, ni aunque veas que cada quincena te está sobrando dinero, pues aunque bien podrías darte un poco de margen para ser “creativo” con tus gastos, lo mejor es no empezar a despilfarrarlo.

3. Recuerda

Otro consejo es tener en mente siempre la meta por la que estamos juntando dinero, si es que adquiriremos algo, pues si se trata de algo que anhelamos o necesitamos, incluso no nos costará tanto hacer un esfuerzo mayor para adelantar el plazo y comprar eso que tanto queremos.

Además de que no es lo mismo ahorrar sólo por el hecho de que alguien te dijo “tienes que ahorrar por si acaso pasa algo”, a hacerlo con la intención de cumplir un propósito más tangible.

4. Organiza

También sé organizado, tanto para distribuir tu dinero como para tus pagos, pues lo mejor es que separes bien lo que destinarás a cada lado y, sobre todo, estés al pendiente de las fechas, luego sale más caro tener que pagar recargos o intereses que no tenemos contemplados, por dejar pasar el tiempo.

5. Resiste

Otra cosa para tener en cuenta es el exterior, pues muchas veces no nos interesa comprar nada para no exceder nuestros gastos, hasta que aparece un anuncio publicitario sobre una oferta de último momento. Resístete a la publicidad, por emocionante que ésta sea, y si es de algo que te interesa, ve al punto uno, razonando la compra para determinar si vale la pena.

6. Reduce

Quizá sea otra cosa obvia, pero es muy importante el reducir los gastos, y es que como mencionamos antes, el ahorro es destinar una parte de los ingresos para este fin, y no sólo destinar lo que sobra.

Además, es muy común tener gastos prescindibles, como pagar mes a mes pagando la suscripción a una plataforma de streaming cuando llevamos medio año sin usarla, o quizá hacer el pago a través de otro servicio para ahorrarnos algo de dinero.

Aquí aplicaría la misma de gastar de forma inteligente, eliminando lo que se pueda eliminar y reduciendo en lo demás, aunque eso sí, siempre sin que el ahorro llegue a representar un riesgo para ti.

7. Ajústate

Es probable que todos hayamos visto el efecto de ir con hambre a surtir la despensa, por lo que este consejo resulta completamente útil, y es el ir al supermercado, o al mercado a hacer las compras con una lista en la que incluyamos sólo lo que necesitamos y nos apeguemos a ella para no salir de ahí con una cuenta al triple porque todo se nos antojaba.

8. Planea

Mientras que, por último, y quizá el más importante, es la elaboración de un presupuesto, en el que apuntemos todos nuestros gastos contra nuestros ingresos, a fin de que cada peso y cada centavo estén etiquetados y al final no terminemos sin saber en qué se nos fue la mitad de la quincena.

Parte de este punto radica también en evitar que por pasarnos en algún rubro tengamos que “pellizcar” del fondo de emergencias o del ahorro, pues es así como nunca llegamos a nuestra meta, o tenemos algo en caso de alguna enfermedad o por si nos quedamos sin trabajo.

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