Estados Unidos, campeonas del voleibol

EFE Milán 12-10-2014 18:27

El equipo de voleibol femenino ganó el Mundial de la disciplina ante China.

La selección estadounidense de voleibol femenino doblegó a la de China por 3-1 (27-25, 25-20, 16-25 y 26-24) en la final del Campeonato del Mundo y sumó su primer título internacional, tras acumular dos subcampeonatos olímpicos consecutivos (2008 y 2012).

Las pupilas de Karch Kiraly impusieron su ambición sobre el cuadro chino, que sólo logró apuntarse el tercer parcial, y festejaron en el Mediolanum Forum de Milán la conquista de su primer Campeonato del Mundo.

Pese a encontrarse con cuatro puntos de desventaja (2-6) en el inicio del choque, el combinado dirigido por el tres veces campeón olímpico se entregó al talento de Murphy, Hill y Fawcett para voltear el marcador y liderar el partido y la final.

En la búsqueda de su primer título internacional, el equipo norteamericano encontró el camino de la victoria en el servicio de Akinradewo, indescifrable para las defensoras chinas.

Dispuestas, sin embargo, a sumar su undécimo triunfo en el campeonato y a establecer un nuevo récord para su país, las jugadoras chinas aprovecharon un tiempo muerto solicitado por Lang Ping para recuperar la solidez que le llevó a doblegar a las anfitrionas en semifinales.

Murphy y Akinradewo neutralizaron la reacción de su rival y situaron a Estados Unidos en disposición de cerrar la primera manga. Tras tres intentos fallidos, el grupo capitaneado por Alisha Glass certificó su dominio y golpeó primero en la final (27-25).

La conquista del título pasaba por doblar la ventaja con respecto a su adversario, por lo que el cuadro estadounidense caminó con decisión a por la segunda manga. Hill, con su séptimo punto del encuentro, abrió una brecha que resultaría insalvable (18-22) para la joven escuadra asiática.

Su precipitación se tradujo en errores no forzados y estos permitieron a Estados Unidos dar un importante paso hacia la medalla de oro con el 2-0.

En una batalla a cara o cruz, las pupilas de Ping crecieron en ambición, fe e intensidad y pronto negaron la renta estadounidense para liderar la tercera manga, por 14-8, en una derroche de potencia pero también de técnica.

Por primera vez en la final, Zeng y Liu acumularon remates con relativa facilidad mientras el conjunto estadounidense añoraba las apariciones de Hill, Fawcett y Larson-Burbach cerca de la red.

Para confirmar sus intenciones en la final, el cuadro asiático obtuvo el 2-1 (16-25) tras un remate de Zeng.

Kiraly reclamó entonces a sus pupilas "hambre" y "ambición" y las subcampeonas olímpicas respondieron multiplicando sus estadísticas en el bloqueo.

Dietzen acompañó a Hill en la anotación para acercar a Estados Unidos hacia la conquista de su primer gran torneo después de años persiguiendo el oro en JJOO, Mundiales y Copas del Mundo.

El aciago recuerdo de las dos finales perdidas en 1967 y 2002 reapareció en el Mediolanum Forum de Milán cuando China se decidió a igualar el encuentro, pero una recepción fallada y un remate de Akinradewo dieron a Estados Unidos su primera pelota de partido.

Desaprovechado el primer intento, Hill volvió a citar al cuadro norteamericano con el oro y éste llegó con el definitivo 26-24.

Estados Unidos se convirtió en el primer equipo desde el año 2002 que gana el torneo tras haber perdido dos partidos. Entonces fue Italia quien logró superar dos derrotas para colgarse el oro.