Duermen en la calle en espera de que abran cruce fronterizo en Tijuana

En sus coches es como algunos esperan a la apertura del cruce fronterizo con Estados Unidos. Foto: Cuartoscuro/Archivo

Decenas de ciudadanos que viven en Baja California se han lanzado a dormir a la calle mientras esperan en los alrededores de la Garita de Otay, en la frontera entre Tijuana y San Diego,  a que abran el cruce fronterizo a Estados Unidos y así se puedan trasladar, mayormente, a sus lugares de trabajo y otros sitios en la nación norteamericana.

Desde la noche anterior comienzan apartar un lugar y ser de los primeros en poder ingresar a Estados Unidos a las 6:00 de la mañana cuando abren el cruce fronterizo.

Uno de ellos es Ricardo, que llega alrededor de las 11:30 de la noche, permanece en el auto de su hermana quien es finalmente la que cruzará a trabajar al vecino país, y el esfuerzo del hombre es para ayudarla en sus traslados.

La mayoría se duerme aquí, pero si he visto muchos que dejan los carros porque a los costados de los carriles hay carros sin personas nada más llegan los estacionan y se van", señala Ricardo Álamo uno de los que duerme en espera de la apertura del cruce fronterizo.

Desde hace unos días autoridades de aduanas y protección fronteriza mantienen cerrada esta garita de la 10:00 de la noche a las 6:00 de la mañana ante la disminución del flujo de personas por la emergencia sanitaria que se inicio a causa de la pandemia de COVID-19.

No son tan precisos en decir, pásenle ahí, a ellos no les importa, al gobierno a los migras no les importa lo que estuvimos aquí nosotros sufriendo la incomodad todos eso para agilizar el pase", David González.

A pesar de las restricciones para que solo se permita el cruce esencial a los Estados Unidos, son miles los que lo hacen diariamente, los tiempos de espera se han incrementado, por ello es que muchos prefieren dormir en sus carros para alcanzar a llegar a sus trabajos en las mañanas.

En las filas peatonales también hay una gran concentración de personas, cientos llegan de madrugada y en sillas o en el piso duermen a la intemperie en espera que abran la frontera y cruzar.

  • Mientras no se normalicen la situación, estas escenas en los cruces fronterizos entre México y Estados Unidos se repetirá todos los días.