Los municipios de Múzquiz, Sabinas y San Juan de Sabinas, en la región carbonífera del estado, sufrieron los embates de una tormenta severa que los azotó la noche del lunes y dejó a su paso incalculables daños materiales.
Avisos meteorológicos alertaron desde la tarde del lunes la posibilidad de tornado para la zona fronteriza de Coahuila y Texas; sin embargo, la tormenta que antecede estos fenómenos se desvió y llegó a la región carbonífera con intensa lluvia, granizo y rachas de viento que alcanzaron los 60 kilómetros por hora.
Autoridades de los tres municipios afectados, reportaron fallas en el servicio eléctrico y telefónico tras la caída de decenas de árboles, postes y techos de algunas viviendas; en las últimas horas los servicios han sido restablecidos de manera paulatina.
Personal de la Clínica 23 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) reportó el estallido de vidrios y el colapso del plafón del techo en el área de urgencia. Los pacientes hospitalizados fueron llevados a los pasillos. A pesar de la intensidad del fenómeno meteorológico no fueron reportadas personas sin vida o lesionadas.
Protección Civil estatal informó que persiste la vigilancia meteorológica para las regiones norte, carbonífera y cinco manantiales ante el aviso de tiempo severo con posibilidad de formación de tornados y torbellinos.