La Procuraduría General de la República (PGR) incineró 421 kilos 080 gramos de cocaína en el puerto de Manzanillo, Colima.
La droga procedía de Puerto Balboa, Panamá, bajo régimen aduanero de trasbordo Internacional; su destino era Puerto Quetzal, Guatemala.
Se aseguró dentro del Puerto de Manzanillo por la Secretaría de Marina-Armada de México (Semar) en coordinación con el Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Con esta acción se cumple con el Programa Nacional de Destrucción de Narcóticos 2016, y con lo establecido en el Código Federal de Procedimientos Penales, el cual señala la incineración de drogas aseguradas y destrucción de objetos que son considerados como instrumentos del delito.