La oscuridad de la noche en la Ciudad de México (CDMX) se rompe con las luces de las ambulancias y el llamado de urgencia de pacientes por COVID-19.
Por alguna razón, los síntomas se agudizan más en la noche", asegura Héctor Páramo.
El jefe de guardia nocturna de la Cruz Roja Mexicana, Héctor Páramo, cuenta a Unotv.com que, con la dificultad para respirar, llega también la angustia y la petición de una ambulancia.
Pacientes y familiares se llenan de temor.
Ellos sienten, hay esta sensación de muerte, escenas muy tristes que a veces llegamos a ver, donde sacamos al paciente para llevarlo al hospital, lo metemos a una cápsula para que vaya protegido él y todo el ambiente donde el paciente va a viajar y al meterlo, ellos saben que posiblemente ya no regrese", asegura Páramo.
El también encargado de la sanitización de las ambulancias detalla que las atenciones nocturnas por coronavirus han hecho a un lado la prevalencia de otras emergencias como los accidentes automovilísticos.
Estamos teniendo un alto índice de atenciones en este tipo de pacientes junto con otras enfermedades, la parte de los accidentes ha bajado dramáticamente", establece Héctor Páramo.
En sus 27 años de servicio, Héctor nunca había vivido algo similar, pues sus madrugadas le demandan -hoy- empeñar toda su vocación para salvar vidas.
De cada 10 servicios te puedo decir que podíamos atender cinco choques, dos baleados y tres enfermos. Hoy en día atendemos un choque, un baleado y los demás son enfermos", finaliza el jefe guardia del turno nocturno en la Cruz Roja.