La SEP presentó a madres y padres de familia una nueva platilla integrada sólo por maestras, además de directora y subdirectora, para el kínder Marcelino de Champagnat, luego de las acusaciones de abuso sexual contra menores por parte de un profesor.
Tras la noticia, surgieron reacciones positivas, pues consideraron que se sentirán con más tranquilidad de llevar a sus hijas e hijos a la escuela.
"El hecho de que ahora sí haya puras maestras que estén viendo a nuestros hijos es más tranquilo para nosotros, pues no pensamos que una maestra vaya a tener hacer cosas así o algo", dijo Pablo Cadena, padre de familia.
El cuerpo académico quedó integrado para el turno matutino por diez maestras, mientras que en el turno vespertino habrá seis. Todas cuentan con exámenes psicológicos y de capacitación, de acuerdo con Julio Calvario, director de personal de la SEP.
"No estamos improvisando absolutamente nada. El personal que está llegando tiene toda la capacidad todas las habilidades para sacar adelante la situación de la escuela", explicó.
Piden que salgan otros funcionarios
Otra demanda de los papás es que salga de este plantel la oficina de la Supervisión de Zona, unidad a la que pertenecía el presunto abusador de menores.
En la escuela ya se trabaja para la instalación de 32 cámaras de videovigilancia, y la promesa de las autoridades es cumplir con todas las exigencias de los padres de familia para regresar a clases el próximo lunes.
Además del personal académico, también se renovó el personal de limpieza con dos mujeres por turno.
La semana pasada, la Procuraduría General de República (PGR) inició una carpeta de investigación sobre el caso de los 36 niños que supuestamente sufrieron abuso sexual en el jardín de niños ubicado en la alcaldía Gustavo A. Madero, en la Ciudad de México.
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