Fueron asegurados precautoriamente 180 ejemplares de vida silvestre en Puerto Marqués, Acapulco, debido a que sus propietarios no acreditaron su legal procedencia y los comercializaban ilegalmente, informó la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
Durante un operativo realizado en coordinación con la Policía Federal, división Gendarmería, personal de la delegación de Profepa en Guerrero hallaron a los responsables que comercializaban estos ejemplares dentro de un establecimiento operado por una familia completa, dedicada a vender animales vivos y en taxidermia.
La Profepa aseguró 22 armadillos, cuatro mapaches, una boa, dos víboras de cascabel y un tlacuache, todos ellos en taxidermia. Asimismo, 40 tortugas de río, un cocodrilo de río y dos pericos atoleros, todos vivos; así como 74 estrellas de mar y 33 corales muertos.
En dicho operativo también se logró la detención en la playa de una persona en posesión de un ejemplar de cocodrilo de río, el cual utilizaba en ese momento para la toma de fotografías con turistas.
A su vez, se detectó a una mujer en posesión de 17 armadillos en taxidermia, por lo que ambas personas fueron puesta a disposición del agente del Ministerio Público Federal, así como al ejemplar de cocodrilo de río vivo y los armadillos en taxidermia.
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