Luego de que se hiciera pública la denuncia del estadounidense James Wooden, quien asegura que el 28 de abril de 2013 fue torturado a manos de elementos de la policía de Taxco, Guerrero, el pasado 16 de julio, el actual presidente municipal, Omar Jalil Flores Majul, emitió un comunicado dirigido a los medios de comunicación en el que reprueba los hechos ocurridos, pero niega que en su administración exista registro de la recomendación emitida por la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) de Guerrero.
Sin embargo, tanto James como su abogado, Juan Carlos Gutiérrez, consideran que el comunicado tiene inconsistencias, pues con documentos en mano, muestran que a pesar de que la recomendación de la CEDH está dirigida al expresidente Municipal, Salomón Majul, la actual administración no solo ha dado respuesta a la recomendación, emitiendo una propuesta de indemnización fechada el 30 de marzo de 2016 y dada por incumplida por la Comisión Estatal de Derechos Humanos, sino que además existe un acta circunstanciada en la que se da fe de que el 11 de febrero de 2016 autoridades del municipio, de la Comisión Estatal, abogados, James y su esposa Carmen, se reunieron en Chilpancingo, Guerrero, para buscar acuerdos.
Gutiérrez solicita que la actual presidencia municipal precise la información y ponga sobre la mesa las recientes detenciones de elementos y representantes de la policía de Taxco por presuntos nexos con la delincuencia organizada.
"Ante sus manifestaciones les pedimos que públicamente reconozcan la existencia de un acto grave de tortura y abran un espacio para investigar a los responsables, coadyuven con el Ministerio Público del estado de Guerrero y también coadyuven con la investigación que fue abierta en la Procuraduría General de la República y se pronuncien respecto de la reparación del daño de la víctima y de su esposa", señaló Juan Carlos Gutiérrez.