Los deseos de una mejor vida, casi les cuestan la vida a una mamá y su hija. Ambas migrantes cruzaron el río Bravo con demasiadas dificultades, pero lo lograron gracias a la intervención de un oficial de Estados Unidos, quien al final las terminó apoyando en su solicitud de asilo.
- Estas mujeres son originarias de Guatemala.
Los hechos se registraron este lunes, cuando las viajeras decidieron cruzar el río Bravo entre los límites de Matamoros, Tamaulipas, y Brownsville, Texas. Mamá e hija iban atrás de otra familia que también fue rescatada del lado estadounidense.
Milvia y su hija de 11 años, Melani, entraron al agua y luego de avanzar algunos pasos, elementos de la Guardia Nacional les pidieron que regresaran; sin embargo, las guatemaltecas se quedaron inmóviles, por lo que un personal de seguridad mexicano se ató con una cuerda para tratar de jalarlas, aunque fue en vano.
Al ver que la vida de las migrantes podría estar en peligro, intervino el policía estadounidense. Les gritó que desistieran, pero ellas no hicieron caso y trataron de avanzar.
Al final, el oficial las ayudó a que cruzaran, luego las llevó a las oficinas correspondientes, donde platicó con ambas. Las guatemaltecas llegaron desde el 22 de mayo a Matamoros, desde esa fecha esperaron a que les brindaran atención, pero eso nunca ocurrió.