La calificación en el Gran Premio de Bahréin fue desafortunada para Sergio Pérez, quien consideró que puede salir de la situación el domingo, pese a que arrancará en el sitio 18 en el circuito de Sakhir.
"Tuvimos la mala suerte de que cuando venía completando la vuelta hubo una bandera doble amarilla y tuve que abortar la vuelta", comentó.
Además, el piloto mexicano agregó que su monoplaza cada día mejora más, una situación que lo tiene muy tranquilo de cara a las siguientes carreras.
"Mejoramos mucho el auto, creo que el ritmo hoy era mejor. Esperemos poder rescatar algunos puntos mañana", aseguró tras salir en la Q1.